Issue and Date
Revolución #122, 9 de marzo de 2008
Número actual | Números Anteriores | Bob Avakian | PCR | Temas | Comunícate |
Celebremos nuestra unidad en la lucha el Día Internacional de la Mujer
|
Nosotras, las mujeres de Irán, marcharemos por las calles de Europa el 8 de marzo para dar a conocer al mundo que nosotras, ante uno de los gobiernos más mortíferos y que más oprime a la mujer (la República Islámica), seguiremos rebelándonos contra todo lo reaccionario hasta lograr la emancipación de la mujer y de toda la humanidad.
Reafirmamos que en toda la historia los dueños nunca han puesto en libertad a los esclavos. Por eso condenamos y rechazamos las declaraciones indignantes de George Bush de que quiere liberarnos.
Exhortamos a las mujeres y a los hombres de Estados Unidos a solidarizarse con nosotras en nuestra difícil lucha contra nuestros dos enemigos, que son parte de la misma matriz: la República Islámica de Irán y el imperialismo estadounidense.
La opresión de la mujer es el eje de la teocracia islámica de Irán. El estado religioso es la garantía del patriarcado total. Aquí, llevan a cabo todo tipo de ritual salvaje con el cuerpo de la mujer con la aprobación oficial: obligarla a cubrirse todo el cuerpo de pies a cabeza con la hejab; arrestar y torturar a las que se rebelan contra la hejab; matar a pedradas y ahorcar a los "infieles" y las mujeres adúlteras. En Irán la mujer no tiene el derecho de viajar, trabajar o tener una educación sin el consentimiento del padre o el esposo. Es un patriarcado total. Los códigos penales medievales son la garantía de los códigos morales medievales.
En Irán, la opresión extrema destroza y denigra a la mujer, pero también la convierte en rebelde temible. Nos rebelamos contra nuestra situación y luchamos por hacer que todos los oprimidos y explotados de Irán se rebelen contra la esclavitud de la mujer. Hoy en Irán, todos los movimientos progresistas y revolucionarios —los obreros que luchan por el derecho a convocar huelgas y tener sindicatos, y los estudiantes que luchan contra la tiranía y las amenazas de guerra estadounidenses— exhortan a abolir las leyes que relegan a la mujer a una situación de esclavitud; exhortan a separar el estado y la religión, y reconocen que lo esencial de esta separación es poner fin a la esclavitud de la mujer.
En medio de nuestra lucha sangrienta contra la República Islámica, también tenemos que oponernos a otro enemigo sangriento: el imperialismo estadounidense.
El gobierno de Bush dice que va a "liberar" a los pueblos del Medio Oriente: es un engaño cien por cien criminal y cínico. ¡Sabemos cómo es esa "liberación"! La miseria y opresión de nuestras hermanas en Afganistán e Irak nos llena de un profundo pesar e indignación. En el Irak "liberado", con casi un millón de muertos y el trastorno total de la vida de millones más, muchas niñas que no han muerto en los bombardeos y redadas salvajes del ejército estadounidense terminan en el marcado libre de la prostitución. Al fin y al cabo, es la "liberación" del capitalismo de mercado libre que tiene el comercio de cuerpos humanos.
Queremos que quede en claro una cosa: nosotras, las mujeres de Irán, que hemos librado una clase de guerra civil contra la República Islámica desde hace 29 años, no estamos luchando por liberarnos de las garras de un sistema social, ideológico y político anticuado como la República Islámica, para luego dejar que otro sistema anticuado como el imperialismo estadounidense lo reemplace. No hay ninguna trampa más mortífera para los oprimidos que preferir a un grupo de opresores antes que otro.
No necesitamos que nadie nos "libere". Llevamos 29 años luchando por nuestra propia liberación, y Estados Unidos ha ayudado a consolidar a la República Islámica y a otros fundamentalistas islámicos "Made in USA" en el Medio Oriente. Los gobiernos estadounidenses (tanto republicanos como demócratas) son expertos en unir a toda clase de momias reaccionarias tribales y religiosas y caudillos patriarcales para "forjar un estado" con ellos. Esta es la clase de pluralismo y democracia que Estados Unidos ha repartido a los pueblos del Medio Oriente al lado de sus bombas.
No necesitamos la "liberación" al estilo de George Bush. ¡Pero sí necesitamos el apoyo de la gente de Estados Unidos!
Necesitamos que la gente de Estados Unidos luche contra su gobierno mientras nosotras luchamos contra el nuestro.
George Bush y el gobierno islámico de Irán nos advierten que tenemos que escoger el uno o el otro. ¡No! No dejaremos que obliguen a los pueblos de nuestros países a caer en esta trampa política. Es una maniobra ingeniosa aprovechar su lucha para aplastar toda posibilidad de que el pueblo se les arrebate las riendas de la sociedad haciendo la revolución en Irán y en Estados Unidos. En vez de seguir su camino siniestro y destructivo tenemos que seguir el nuestro: apretarlos entre nuestras luchas revolucionarias internacionalistas.
Creemos que la República Islámica es parte del sistema mundial que Estados Unidos y las demás potencias imperialistas controlan y dirigen: un sistema extremadamente opresivo, antipopular y misógino que domina el mundo. Tenemos que enterrar este sistema si queremos liberarnos. Nosotras, las mujeres del mundo, tenemos que romper nuestras cadenas y desencadenar a la mujer como una fuerza poderosa para este cambio epocal. Tenemos que librar una lucha por toda la humanidad.
Organización de la Mujer 8 de Marzo
(Irán, Afganistán)
2008
Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.