Revolución #155, 8 de febrero de 2009
La lucha por justicia para Oscar Grant
Poli asesino libre bajo fianza, masas a la calle
“No podemos confiar en que el sistema nos haga justicia”
OAKLAND — El 30 de enero, la gente llenó la sala del tribunal para exigir que se quedara en la cárcel Johannes Mehserle, el policía que el día del Año Nuevo le disparó por la espalda a Oscar Grant, de 22 años. El juez Morris Jacobson reconoció el riesgo de que huyera Mehserle, a quien habían apresado en Nevada (adonde huyó durante la investigación inicial). Jacobson incrédulo sobre el cuento dudoso de Mehserle acerca del asesinato de Oscar Grant, dijo: "El policía está dispuesto a añadir elementos y cambiar la historia e inventar algo que no es verdad para evitar las consecuencias". Aun así el juez le fijó una fianza de $3 millones de dólares.
La gente protestaba fuera del tribunal y una muchedumbre llenó los pasillos del edificio, coreando: "¡Todos somos Oscar Grant!" Después del anunció que Mehserle recibiría fianza, una marcha empezó con unas 50 personas y aumentó a cientos. Bloquearon el tráfico en un cruce importante. "Aún estaría en la cárcel si fuera negro. Es una injusticia", gritó una joven. Otros corearon: "¡Asesinos! ¡Asesinos! ¡Asesinos!" y "¡Todo el sistema es culpable!"
Las autoridades respondieron con una masiva arremetida policial contra la manifestación. Sacaron un vehículo blindado y dispararon gas lacrimógeno y municiones "menos que mortíferas". Grupos de policías agarraron a manifestantes, los echaron al suelo y los golpearon. Arrestaron por lo menos ocho personas. La chota empujó a la gente con porras y dispersó la manifestación.
Mientras desataban este ataque feroz y violento contra los manifestantes, las autoridades dijeron dejemos que el sistema siga su curso. "Lo importante es recordar que las ruedas de la justicia ya están en movimiento", dijo el alcalde de Oakland, Ron Dellums. "Ya acusaron a Johannes Mehserle de homicidio. Recibirá un debido proceso establecido por la ley y este proceso seguirá su curso. Mientras tanto pido la paz en nuestras calles".
VIMOS ADONDE CONDUCE ESTE CAMINO. VIMOS LIBERADOS A LOS POLICÍAS QUE DISPARARON A SEAN BELL. VIMOS LIBE-RADOS A "THE RIDERS" — UNA PANDILLA DENTRO DEL DEPARTAMENTO DE POLICÍA DE OAKLAND QUE ATERRORIZABA A LA GENTE DEL OESTE DE OAKLAND. VIMOS QUE NI SIQUIERA ACUSAN A LA MAYORÍA DE LOS POLICÍAS QUE BRUTALIZAN Y MATAN.
Mientras la gente está indignada por otro asesinato policial se le dice una y otra vez que confíe en el sistema legal que permita que el proceso legal siga su curso. Pero veamos cómo realmente funciona este sistema legal, un sistema que opera dentro del capitalismo; pensemos en si debemos depender de él, o depender de la lucha de la gente.
¿Investigación o encubrimiento?
El sistema respondió al asesinato de Oscar Grant por la policía del BART prometiendo una inmediata y plena investigación. Una "investigación" —no un arresto— basada en video de testigos oculares. ¿Pero qué pasó en realidad?
BART, conocido por su vigilancia constante de pasajeros por medio de una red de cámaras dijo que sus videos no captaron "nada de importancia". La Policía del BART intentó confiscar los videos de testigos inmediatamente después del disparo, incluso persiguió a una joven que estaba en el andén grabando a los policías mientras detenían a Oscar y otros jóvenes esa noche.
El jefe de la Policía del BART dijo a la tele que los videos grabados por testigos con sus celulares no eran "concluyentes" a pesar de que la gente por todas partes se escandalizó cuando vio los videos mostrando al oficial Mehserle pegándole un tiro a Oscar Grant en la espalda mientras estaba boca abajo en la plataforma del tren.
Tres semanas después del asesinato otro video se transmitió por KTVU que mostró un segundo oficial dándole un puñetazo en la cabeza a Oscar Grant antes del disparo. Una semana después la Policía del BART no había iniciado una investigación del incidente. Este video ha estado disponible en los sitios web de los canales de televisión desde el 7 de enero. El comentario del jefe de la Policía de BART fue, "Hasta que consigamos una copia original del video de KTVU y podamos enviarlo a un laboratorio forense, no podemos tener ningún grado de certeza sobre lo que pasó en esa confrontación".
La Policía de BART y BART no intentaron entrevistar a testigos a pesar del hecho de que había veintenas y quizás cientos de testigos en un tren de BART lleno de gente volviendo de celebraciones del Año Nuevo. En lugar de esto, los policías de BART empujaron a la gente, devolviéndola al tren después de ser testigos del disparo, incluso le apuntaron con pistolas TASER a la gente indignada por lo que hacían a Oscar y a otros jóvenes que fueron sacados del tren. La policía ordenó que el tren saliera. La chota ni siquiera informó del disparo por sus radios. ¿Y se supone que estas personas van a "investigar"? ¿Deberíamos depender de este sistema por justicia?
La Policía de BART ha mantenido una cortina azul de silencio sobre el asesinato. Cuando la policía de BART presentó su investigación interna al fiscal del condado de Alameda, ni siquiera recomendó que Mehserle fuera enjuiciado.
El fiscal del distrito de Alameda, Tom Orloff —quien enjuició a Huey Newton y otros miembros del Partido Pantera Negra en los 1970— esperó dos semanas antes de arrestar a Mehserle hasta que fue forzado por la lucha de la gente de Oakland. Mientras Orloff hacía su "investigación", arrestaron a más de 100 personas que pedían justicia para Oscar Grant.
Semanas después del asesinato, el jefe de la Policía de BART, Gary Gee, distribuyó una carta a su división. No les ordenó cooperar con la investigación ni admitir lo que sabían. No le preocupó que un oficial baleara a un hombre desarmado, ni que otro le diera un puñetazo en la cabeza. No mencionó la necesidad de sensibilizarse hacia la comunidad o con la familia de Oscar Grant que estaba de luto. En lugar de eso, fue una carta de elogio, diciéndoles que "tienen nuestro pleno apoyo". Les advirtieron "mantener profesionalismo e integridad aunque fueran expuestos al abuso público y a los reportajes de los medios". Lejos de expresar preocupación por los sentimientos de la comunidad y de los parientes de Oscar Grant, instruyó a los oficiales cómo apoyar a uno de los suyos por medio de enviar comida y dinero a Mehserle en la cárcel.
ESTO NO ES UNA INVESTIGACION. ES UN ENCUBRIMIENTO. ¿Por qué alguien que sea serio creería en esta farsa? LOS PODEROSOS NO QUIEREN LA VERDAD. PROTEGEN AL SISTEMA Y PACIFICAN AL PUEBLO. Intimidan con fuerza abrumadora a aquellos que toman acción política independiente. Tratan de inculcar temor en otros para que se distancien de los activistas y confíen más en la policía que ha cometido crímenes y en los tribunales que los protegen. Confiar en este sistema no traerá justicia para Oscar Grant o alguien más atacado por la policía. Esto es un callejón sin salida para el pueblo y solo fortalecerá al sistema. Aquellos que verdaderamente quieren justicia y quieren luchar por esta deben crear un movimiento desafiante de resistencia.
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Las semanas desde el asesinato de Oscar Grant han puesto los reflectores sobre el terror policial y han sido un caso modelo en encubrimiento criminal: un recuerdo vívido de cómo funciona este sistema. Vemos los videos solo después de que las personas que los grabaron los llevó a los medios. Aun con esta evidencia contundente, el policía fue arrestado solo después de las protestas de la gente. Y con todo esto lo único lo que escuchamos del alcalde, las cortes y la policía es "tengan fe en el caso". Con todo lo que hemos visto en el último mes, esto es la única cosa que no podemos hacer. Porque todo el sistema es culpable. El sistema premia la brutalidad y el asesinato de la policía porque son parte de la violencia con el aval del estado que la usa para someter al pueblo. Solo desenmascarando estas mentiras y el encubrimiento y un movimiento decidido de resistencia y lucha podría haber una esperanza de justicia para Oscar Grant.
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