Revolución #155, 8 de febrero de 2009
¿"Transición pacífica"... o una historia repleta de guerras y saqueo?
En sus palabras de bienvenida durante la inauguración de Barack Obama el 20 de enero, la senadora Dianne Feinstein dijo:
Hoy el mundo nos sigue de cerca mientras nuestra gran democracia emprende esta transición pacífica del poder. Aquí en nuestro National Mall, donde nos acordamos de los fundadores de nuestra Nación y de los que combatían para que fuera libre, nos reunimos para grabar otra raya en la roca viva de la historia.
La libertad de un pueblo para escoger a sus líderes es la raíz de la libertad. En un mundo donde el conflicto político se resuelve demasiadas veces con la violencia, nos reunimos aquí cada cuatro años para conferirle el poder de la Presidencia a nuestro líder, elegido democráticamente.
Los que dudan de la supremacía de la papeleta de votar sobre la bala nunca podrán disminuir el poder que engendran las luchas no violentas por la justicia y la igualdad como la que hizo posible este día. Un triunfo que traiga la mancha de la brutalidad nunca podría igualar a la dulce victoria de esta hora ni a lo que significa para los que marcharon y murieron para hacerla realidad.
Tenemos dos puntos de respuesta para esa bola de mentiras de Dianne Feinstein:
Primero, la historia de Estados Unidos desde su fundación está saturada de guerras, entre ellas una gran guerra de Secesión que mantuvo unido al país bajo el dominio de la burguesía. ¡En esa guerra, murieron lo que equivaldría (relativo a la población estadounidense actual) a seis millones de personas!
Segundo, la historia de Estados Unidos está repleta de otras guerras (entre ellas guerras mundiales), el saqueo y la explotación. En vista de que están saqueando, explotando y asesinando a millones y cientos de millones de personas, ¡puede que no les cueste tanto que las diferentes facciones de la clase dominante transfieran el poder una a otra y vice versa sin tener que matarse en el proceso!
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