Revolución #182, 8 de noviembre de 2009
Académico marxista responde a columna del WSN
De Raymond Lotta
Publicado en 2 de noviembre de 2009
[Nota de Revolución: Lo siguiente es una respuesta de Raymond Lotta a un editorial de David Ryan Williams en el Washington Square News (nyunews.com/opinion/2009/sep/17/williams/#/opinion/2009/oct/28/williams/?ref=ajax), un periódico de estudiantes de la Universidad de Nueva York (NYU), sobre la charla de Lotta del 26 de octubre en NYU. La traducción es responsabilidad de Revolución.]
David Ryan Williams toma el camino fácil, rápido y ciego al responder a mi conferencia “Todo lo que te han dicho sobre el comunismo es falso”. Williams ignora los hechos y repite sin pensar las mentiras habituales acerca del comunismo. Esas mentiras pueden ser fácilmente refutadas. El único problema es que a nadie se le permite hacer esto seriamente en la esfera pública. Tal es el peso y la influencia de la institucionalizada “sabiduría convencional” sobre el comunismo.
PUNTO: Williams dice que no hubo disentimiento bajo el comunismo. ¿Ha escuchado de la Revolución Cultural de China de 1966-1976? Pues ahí se dio el debate y la protesta a una escala que no se ha visto en ninguna sociedad moderna occidental: manifestaciones y reuniones de masas, luchas políticas para derrocar la autoridad opresiva y las personas de diferentes sectores de la sociedad examinaron y criticaron el liderazgo y la política en la sociedad. Solo en Beijing había más de 900 periódicos. El “régimen maoísta” abrió salones de reunión, proporcionó materiales para cartelones murales de debate y hasta permitió que los estudiantes viajaran en tren gratis de modo que la gente pudiera tomar parte de este movimiento.
PUNTO: Williams alega que se cometieron “ejecuciones en masa” contra los cosacos en 1919. Eso, de plano, no es cierto. De manera cómoda, Williams omite el hecho sobresaliente de que en ese momento ardía una guerra civil en la Unión Soviética. Esa guerra civil la instigaron los reaccionarios anticomunistas en la Unión Soviética ayudados por Francia, los Estados Unidos y otras potencias occidentales que pretendían destruir la nueva sociedad socialista. Las fuerzas armadas cosacas eran parte de este violento embate contrarrevolucionario. Y en el contexto de esta brutal guerra civil murieron soldados y civiles. ¿Acusaría Williams a Abraham Lincoln de genocidio por haber librado la guerra civil contra la confederación?
PUNTO: Williams alega que murieron 20 millones de personas mientras que Stalin estaba en el poder. Williams no cita ningún dato confiable. En los hechos no se dio ningún etno-genocidio en la Unión Soviética, ni tampoco el genocidio político. Incluso uno de los autores de la conocida biblia anti-comunista El libro negro del comunismo quien posteriormente se desligó del libro, tuvo que admitir en [la publicación] Le Monde: “Los campos de la muerte no existieron en la Unión Soviética”. En su mítico número de muertos, Williams incluye las muertes causadas por las hambrunas suscitadas por el racionamiento. Efectivamente se dieron dos períodos de hambrunas en la Unión Soviética: uno fue resultado del desplazamiento causado por la guerra civil (1918-21); el otro (1932-33) fue resultado de un descenso de la producción. El racionamiento no fue la causa de esas hambrunas sino que fue una parte del sistema de distribución de alimentos y una respuesta a la emergencia y tuvo el propósito de salvar vidas.
Las mentiras y las distorsiones que David Ryan Williams repite predominan en los medios de comunicación y se refuerzan en las universidades donde se supone que existan la búsqueda de la verdad y el pensamiento crítico. Todo eso restringe gravemente el discurso sobre por qué otro mundo es necesario y posible. Yo reto al Sr. Williams y a cualquier profesor o académico a un debate público sobre lo que representa el comunismo y su verdadera historia.
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