Revolución #280, 16 de septiembre de 2012
Desde el camino: Voces de la Gira del Autobús Lo BAsico
Entrevista con Ju, voluntaria de la gira, una mujer negra de mediana edad
Revolución: ¿Tal vez puedas empezar por decirme, sobre lo que la llevó a este punto y lo que la hizo venir en la Gira del Autobús Lo BAsico?
Ju: He estado haciendo trabajo revolucionario desde el 2001. En el 2001, yo tuve un rudo despertar al sistema. Mi hijo fue asesinado por la policía. Y por eso he participado desde entonces. Y yo quise venir a la gira porque sentí que soy parte de hacer la historia. Yo sé que hay muchas que están mal en este mundo y me gustaría ser parte de tratar de cambiar eso.
Revolución: ¿Le gustaría hablar más sobre las circunstancias con su hijo, o —?
Ju: Si me gustaría hacerlo.
Revolución: Bien, sí. ¿Algo que usted quisiera compartir?
Ju: Bien, primero que todo, mi hijo era como muchos otros que fueron asesinados sin ninguna razón. Y no se ha hecho justicia. Pasamos por una demanda, pero nunca tuve fe en la demanda porque ya estaba entendiendo cómo es el sistema… Me uní a la coalición 22 de Octubre — el juramento Vidas Robadas, yo juré luchar para mantener la memoria de mi hijo viva como también las memorias de todas las otras personas, todas las vidas robadas. Eso fue lo que realmente me llevó a la lucha, pero una vez que entré en la lucha — yo ya estaba consciente de un montón de cosas que estaban mal, pero me hice más y más consciente de todos los problemas del sistema bajo el cual vivimos. Y empecé a estar de acuerdo con que no es posible corregirlo. No hay manera de arreglar esto. La gente ha tratado de arreglarlo todo el tiempo que hemos estado aquí y nada ha cambiado. Eso sigue igual. Por lo que estoy de acuerdo que esto necesita ser eliminado y crear un nuevo sistema. Y quiero ser parte de hacer que esto suceda.
Revolución: ¿A su hijo lo mató la policía en el 2001?
Ju: Sí. Sí, a él lo mataron en el 2001. Y hubo muchos encubrimientos, hubo toda clase de cosas — lo que es típico de lo que ellos hacen, de lo que hace el sistema: la mentira, de lo que ellos acusan siempre a la gente de no tener remordimiento, pero son ellos los que no tienen remordimiento. Ninguno. Y yo he visto muchas otras vidas robadas. En mi región, cuando matan a alguien, lo que pasa todo el tiempo, siempre trato de visitar a las familias. Yo probablemente podría contar las historias, todo lo que necesito es el nombre para ponerlo ahí, porque siempre es la misma, ellos siempre hacen lo mismo, nunca cambian. Es siempre lo mismo. Y estoy harta y cansada de esto y espero que todos se hastíen y se cansen de esto.
Revolución: El asesinato de su hijo es otro en una larga lista de crímenes y ultrajes de este sistema…
Ju: Correcto.
Revolución: -…lo siento mucho el que su hijo fue otra víctima del sistema.
Ju: Gracias.
Revolución: ¿Puedes hablar un poco sobre cómo usted veía, antes de que esto sucediera, la clase de sociedad y sistema en que vivía y después usted se volvió activa sobre la lucha contra lo que le hace la policía a la gente?
Ju: Yo acostumbraba ir a las urnas. Yo votaba. Sentía que, como una persona negra, estaba feliz de votar porque ese era un derecho que se nos había negado. Y en ese momento creía que esto podía tener un efecto. Trabajé de enfermera. Fui a la escuela porque me harté de trabajar en fábricas. Teníamos muchas fábricas de textiles donde yo vivía. Y trabajé en una fábrica, me sentía como esclava. Cuando tenía que tomar un descanso, tenía 15 minutos de descanso y antes de que pudiera ir al baño, o conseguir una bebida fría, un hombre tocaría el pito y entonces tenía que volver a trabajar. Y no pensaba que pudiera tolerar eso, fui a la escuela para prepararme mejor. Y disfruté trabajando de enfermera, pero aun en el trabajo había mucho que estaba mal. Yo solo estaba tratando, usted sabe, realmente de sobrevivir. Pero cuando el sistema me abofeteó de esa manera, cuando descaradamente no mostraron respeto por mí o mi familia, ese fue el momento de decir basta ya. Fíjate, basta ya. No puedo continuar así [se ríe].
Revolución: Supongo que eso es otro caso donde no se levantaron cargos y ellos trataron de decir que era un "homicidio justificado".
Ju: Sí, eso fue exactamente lo que sucedió. Y nosotros incluso demandamos, porque protestábamos en la calle — nos encontramos con algunos revolucionarios y creímos que deberíamos salir a la calle. Y trataron de castigarnos por eso. Y levantaron una demanda de $10.000 contra nosotros, esperaban que dejáramos de decir la palabra "asesinos". Porque le llamamos al cerdo un asesino, y ellos nos decían que no pudiéramos hacer eso. Después terminé en la corte estatal de apelaciones, todo por esta situación. Ellos lo matan a él y después nos dicen que no podemos llamarlo por lo que es. Y en la autopsia, cuando volvieron los resultados de la autopsia — muy bien sé ahora que eso es lo que todos — dicen "homicidio". Y yo siempre creí que un homicidio es un crimen — "Sí, lo pescamos". Pero no, se trata de algo diferente, es un homicidio diferente cuando lo hacen los cerdos [se ríe]. Por lo que aprendí un montón de cosas como esa… y aprendí que no existe la libertad de expresión. Porque nosotros lo llamábamos por lo que es y después nos van a demandar y nos dicen que no lo dijéramos más. Por lo que todo el sistema es un montaje de mentiras y brutalidad.
Revolución: Tal vez usted podría hablar un poco sobre los años, al conocer esta revolución y su dirección y al empezar a ver las conexiones entre el crimen que le sucedió a su hijo y los diferentes crímenes de este sistema de Estados Unidos y alrededor del mundo.
Ju: Bien, durante ese tiempo estaba sucediendo la guerra en Irak. Yo tuve un hijo que participó en el primer conflicto con Irak. Yo ya estaba enojada por eso. No solo por mi hijo, sino por los hijos de todos. Por lo que supongo que yo ya era una activista contra la guerra. Yo solo empezaba a ver más claramente las cosas malas en el sistema y de ahí empecé a buscar literatura revolucionaria y ésta decía lo que uno ya sabía pero lo que uno no ve en parte o trata de ver, no sé — supongo que yo me contentaba con las migajas. Y eso no es suficiente, de plano eso no es suficiente. Hay que parar los crímenes de este sistema, eliminarlos. Así que también deseché muchas ilusiones mías sobre la religión [se ríe]. Nada más empecé a ver las cosas más claramente que nunca. Y aun con el conocimiento de un montón de crímenes y un poco de lo que aprendí cuando fui a la escuela. Me di cuenta que eso ni era una gota en el océano cuando empecé a darme cuenta del verdadero horror de lo que estaba pasando en el mundo.
Revolución: ¿Podrías hablar un poco sobre esta cuestión de la religión y de desechar sus ilusiones en torno a esto? Porque conozco a muchas personas que tienen el punto de vista, "Ah, no podemos luchar con las personas sobre la religión".
Ju: Pasó mucho tiempo antes de que yo dijera la palabra "comunista" en referencia a mí. Pasó mucho tiempo antes de que pudiera luchar con la gente sobre la religión. Me sentía como si no respetara a las personas. Porque ésta estaba muy arraigada en mí. Y…
Revolución: ¿Usted creció en una familia muy religiosa?
Ju: Sí, yo crecí en una familia religiosa. Y estoy contenta de que ésa es una cadena que he roto. Y por un corto tiempo me retiré del movimiento — cerca de un año. Y estuve en contacto con un camarada, pero trataba de esquivarlo un poco. Después de unos seis meses, decidí hablarle a uno de ellos y me di cuenta de que necesitaba volver al movimiento. Y él dijo: "¿Qué has estado haciendo?". Y le dije: "Tienes que sentarte para escuchar esto que tengo que decirte". Y me dijo: "¿Qué pasa?". Le dije: "Me uní a la iglesia". Él dijo: "Esta bien, te perdonamos" [se ríe]. Pero sí, traté de volver a la iglesia después del 2001. O sea, antes de que mataran a mi hijo, yo no asistía mucho a la iglesia. Pero tenía una raíz religiosa de mi juventud cuando iba casi todos los domingos a la iglesia y era activa en la iglesia. Pero luego, cuando volví —después de que empecé abrirme los ojos y volví— pude ver toda la hipocresía. Pude ver toda la hipocresía. Ellos decían: "Ven como eres, no necesitas tener nada", pero cuando yo iba, lo único de que hablaban era del dinero. Cuánto dinero necesitaban y cuánto más van a conseguir. Y las iglesias tampoco me apoyaron en mi lucha. Tendían a pensar que tal vez la policía sabía algo que nosotros no sabíamos, que tal vez mi hijo se lo merecía. Así veían la cosa… Y después una concejal municipal que era un amigo personal de mi hermana decía: "Ah, él puede ayudarte. Él puede ayudarte". Así que fui y él dijo: "Tráigame todo lo que usted tenga", así que le llevé todo lo que tenía hasta ese momento, todo el papeleo. Después, él dijo: "Bien, vamos a esperar a ver qué muestran las investigaciones". Así que me di cuenta de que el sistema —no me importa quién esté sentado en la silla del concejo o quién esté en la Casa Blanca o en la presidencia— todo es lo mismo. No importa el nombre ni el color. No importa eso. Así funciona el sistema y mientras esa persona trabaje para el sistema, apuntala al sistema. Así que deseché todas mis ilusiones, todo un montón de éstas [se ríe].
Revolución: ¿Y cómo llegó a ver el rol de la religión en particular en eso?
Ju: Muchas personas me dijeron cosas que creo eran crueles, como: "Nada más déjale eso al Señor", "Tienes que continuar con tu vida". Como si mi hijo fuera algo que yo solo debía olvidar. Y si eso era algo que el señor me iba ayudar a resolver cuando el señor no conservó la vida de él. Yo nada más… ¿dónde estaba dios cuando mi hijo fue brutalizado? Pues, no sólo lo mataron, lo golpearon antes de que lo mataran. O sea, eso solo me ayudó a ver que estas cosas no son reales. Y cuando empecé a pensar, a decir que dios no existe, yo me sentía asustada de pensar asá. Así de atrasada era yo. Yo pensaba: si pienso así, algo me va a pasar. Y ahora sé que eso no es verdad, pero…
Revolución: ¿Quiere decir que dios la castigaría, eso es lo que usted quiere decir?
Ju: Sí, sí. Pero me libré de todo eso [se ríe].
Revolución: Quiero pasar específicamente a la Gira en un segundo, pero una parte de por qué estoy insistiendo en esta cuestión de la religión un poco es porque es una cuestión importante ya que muchas personas tienen esta actitud errónea, como: "No se puede luchar con la gente sobre la religión". O "La gente nunca cambiará sobre la religión". Por lo que me preguntaba qué diría la gente que opina: "Usted no puede librar a las personas de la religión" o "la gente oprimida necesita de la religión", o cosas así.
Ju: Yo diría que tal vez algunas personas manejen eso mejor, pero ésa es una contradicción difícil. Solamente aquí durante la gira, en Brooklyn, conocí a tres personas que no nos hablarían porque se enteraron de que somos ateos. Una mujer me dijo: "No, no quiero esa cosa. Todos ustedes son ateos. Yo no quiero saber de eso porque Jesús es verdadero". En otro caso, un hombre que estaba tomando una tarjeta a otro camarada dijo: "¿De que color crees que es Jesús?" El camarada dijo: "Yo no creo en Jesús". El hombre nada más… se puso beligerante y le devolvió la tarjeta y dijo: "No tenemos nada más de qué hablar". Ésa es una contradicción difícil, pero creo que se puede manejarla, porque eso pasó conmigo. Pero se hizo con paciencia. Se hizo con paciencia. A veces, algunas personas, por ejemplo, si dijeran: "Yo no tengo nada más de qué hablar", después yo dudaría en continuar bregando con esa persona. Porque algunas personas se sienten así al respecto y recuerdo que yo en un tiempo lo veía así — si alguien era un ateo, yo no quería hablarles en absoluto. Creía que ellos eran el demonio.
Revolución: ¿Pero cómo ves la importancia de transformar al pueblo sobre esta cuestión? Pues, he aquí una manera de abordarla… ¿Qué crees que significa…?
Ju: Yo creo que podía haber una manera de abordarla si le dejáramos saber a la gente que la religión es una táctica para mantenernos doblegados. Si las personas son honestas consigo mismas, creo que les sería difícil llegara a reconocerlo. Y si recordamos la canción de Nina Simone, "Just go slow", nada más manténgase de rodillas y pidiendo migajas [se ríe].
Revolución: ¿Hablas de la letra de la canción "Mississippi Goddam" (Misisipí, Carajo), cierto?
Ju: Sí, sí. Ahora puedo ver la religión como una soga, como una táctica para mantener a la gente en cintura. Pero estoy acostumbrada a eso y estoy acostumbrada a escuchar a las personas que hablan de esa manera, como: "Déjale eso al Señor" o "El Señor lo resolverá eso por usted". Y algunas veces creo que debemos ser francos y decir que eso no va a funcionar [risas]. Eso no está funcionando.
Revolución: Para volver un poco a la gira misma. Sé que al comienzo hablabas de que sientes que con la gira, en serio querías ser parte de la historia. Tal vez te gustaría hablar un poco en particular de ¿qué te hizo sentir que tuviera que participar en la gira?
Ju: Porque creo que BA necesita estar en todas partes. No escucho a otros hablar sobre la revolución. Nadie. Y con todo lo que está sucediendo, en esencia yo solo veo las cosas como son… que soy un resultado de los años 50 y en esencia yo solo veo que las cosas siguen como antes. Quizá fuéramos a las mismas escuelas, bebiéramos agua de las mismas fuentes o que pudiéramos votar [risas]. Pero votar ¿para qué? Yo vi eso como algo importante hasta que analicé el sistema y supe que no funcionaba, eso no funciona para nosotros, eso no funciona para nadie, excepto para el 1%, tal vez.
Revolución: ¿Qué ha sido su propia experiencia durante años entrándole a BA? ¿Hubo en particular escritos de él que primero estudiaste que fueron como una introducción a su obra? O…
Ju: Bien, no, una buena parte de mi experiencia estaba en el periódico Revolución y mi camarada… nosotros discutíamos, discutíamos y yo leía y leía. Y me gustan todas sus obras. Al principio fue difícil para mí entrarle a lectura revolucionaria, incluso el periódico, porque creía que era posible leerlo al igual que un periódico regular, solo leerlo y dejarlo. Pero esta es una lectura con la que se tiene que tener un diccionario y leer un poco y después volver y leer algo más, porque no es una lectura fácil. Esto no es una lectura fácil. Pero es muy de estudio… uno aprende muchísimo si saca tiempo y lee. Se aprende mucho. Y aprecio el hecho que Bob ha estudiado y analizado y se ha adentrado muy profundamente y ha hecho cosas que nadie más ha hecho. Yo conocía de las Panteras cuando estaban por ahí. No tenía idea que BA fue parte de eso. No escuchaba de los revolucionarios desde los años 70 hasta el 2001.
Revolución: ¿Así que cómo fue la experiencia de saber que había un movimiento para la revolución en este país?
Ju: Me sentí genial. Me sentí genial. Y me gusta correr la voz. Yo solo deseaba que hubiera más de nosotros, porque existen muchas personas que necesitan que se les hable y sean transformadas. Y hay muy pocas. Pero creo que esta campaña, de difundir BA a lo largo y ancho y perder algunas de mis inhibiciones de salir a la calle… y estoy segura que otras personas también… pero creo que todo esto va a ayudar. Y tal vez un día caminaremos por la calle y… nosotros tenemos un pequeño coro en nuestro grupo… y un día vamos a salir a la calle y alguien estará detrás de nosotros, quiero decir al lado de nosotros, coreando un poco y entonces sabremos que estamos corriendo la voz [risas].
Revolución: Tal vez puedes hablar un poco de cómo ves la importancia crítica de llevar a BA en Todas Partes y lo que eso puede importar en la atmósfera en general.
Ju: Bueno, nosotros vamos a los vecindarios oprimidos. Y muchísima gente no sabe que existe una salida. Muchas personas creen en esta necesidad permanente… quiero decir, no sé si creen en esto, pero muchos piensan que esto es lo mejor que podemos hacer. Y me siento bien ayudando a las personas a que se den cuenta de que existe algo más y que no tenemos que vivir de esta manera. Y después de escuchar a oradores como Carl Dix, escuchar a todos los oradores revolucionarios… y de ver el DVD [Revolución: por qué es necesaria, por qué es posible, qué es] y todo eso. Creo que existen algunas personas de mente abierta que escucharían y lucharían con usted. Creo que las vamos a ganar. Las ganaremos.
Revolución: Sé que la gira lleva pocos días. Tal vez puedes hablar un poco de lo que han sido tus experiencias hablándole a la gente, incluyendo a las personas en los vecindarios que están completamente abandonados y dejados podrirse por el sistema.
Ju: Pienso que la mayoría de las personas han sido positivas. Es diferente para mí en que les hablamos a muchos niños y muchos jóvenes. Tuvimos la oportunidad de ir a una escuela y los niños hicieron afiches y cosas… escuelas como jardines de infantes, de todas las edades. Y eso fue emocionante para mí. Eso fue muy emocionante. Y la mayoría de ellos ponían atención, por lo que estoy segura de que sacaron algo de esto. Y con los niños, ellos van a correr la voz.
Revolución: ¿Qué clase de afiches estaban haciendo?
Ju: Como "¿Crees que la vida de los estadounidenses es más importante que la vida de la gente de otros países?" Esa fue la principal pregunta que les hicimos a ellos. Pero también: "No más generaciones…" [Lo BAsico 1:13] Y los muchachos lo estaban entendiendo. Lo estaban entendiendo. En serio. Y se puede decir esto por las respuestas que lo estaban entendiendo. Por lo que podemos hacer lo mismo con algunos adultos y hacer que lo entiendan [risas].
Revolución: ¿Cuáles fueron algunas de las reacciones de los muchachos?
Ju: Ellos estaban diciendo, "No, la vida de los estadounidenses no es más importante y si usted trata mal a alguien porque es de otro país, o porque no se parece a usted, eso es racismo". Y muchos de ellos dijeron escuchar disparos en la noche y algunos de ellos en el día. Una de las niñas estaba preocupada porque las personas se están muriendo de alcoholismo. Por lo que muchos niños están más preocupados de lo que probablemente creíamos.
Revolución: Volvamos a algo que tú dijiste hace un segundo: sé que en un momento dijiste que estaba nerviosa acerca de usar la palabra comunista, o que nunca la habría usado. ¿Cómo hizo…?
Ju: Bien, cuando yo estaba creciendo, un comunista era una cosa mala. Yo asociaba el comunismo con los nazis. Y creo que así nos enseñaban. Creo que esa fue la manera que se nos inculcó a pensar de esto. Quiero decir que se nos enseñó a pensar de esto, incluso en la escuela. Y eso era lo que yo pensaba. Y fue por medio de la educación que aprendí que los comunistas combatieron a los nazis. Y existe una gran diferencia. Y muchas veces cuando le hablo a la gente en los vecindarios oprimidos, eso era algo que se quitaba de manera inmediata. Porque no quiero que eso sea algo que se entrepongan en la manera que nos conectamos con ellos. Averiguo qué piensa alguien de qué es un comunista y después dejarlo todo atrás. Muchos de ellos sí piensan en los "nazis". Al principio yo no decía esa palabra. Pero después de un tiempo y después de ir a diferentes eventos y cosas, uno se empieza a sentir más y más cómodo. Y después se empieza a sentir orgulloso [risas]. Por lo que ya no tengo problemas al decirlo, porque creo que puedo explicárselo más a las personas qué es esto, o seguramente puedo explicarles lo que no es.
Revolución: ¿Cuáles son algunas maneras en que abordarías esto?
Ju: Simplemente preguntándoles, yo les diría a ellos… una niña me dijo: "Voy a marchar con ustedes, ustedes son del NAACP". Le dije, "No, señora, nosotros no lo somos" [risas]. Le pregunté: "¿Sabes lo que es un comunista?". Y ella dijo: "Un nazi". Y le dije: "No", y hablamos sobre esto. Y le hice entender a ella que existe una gran diferencia… no quiero decir una diferencia, no hay nada de similar en lo que es un comunista. Una vez que logremos dejar eso a un lado y de ahí podemos seguir adelante, porque no quiero que las personas se cierren cuando yo diga que somos comunistas y piensen que somos malos como 'Uds. son de los Testigos de Jehová, yo no quiero hablar con usted', me entiende, cosas así. Me gusta ir directo y refutarlo y salir de eso. Al comienzo, yo acostumbraba a darles vuelta, a hablarles de todo y evitar esa palabra, pero ahora yo menciono la palabra directo y así no hay decepción, pero me aseguro de que entiendan que un comunista es alguien bueno y no un nazi.
Revolución: ¿Y cómo es tu propio entendimiento del comunismo… cuál fue el proceso por el cual se desarrolló tu propio entendimiento y cambió durante los años?
Ju: Algo de educación, leyendo, estando alrededor de los comunistas. Mi compañero en casa, él no se intimida al decirle a la gente que es comunista, diciéndoles que es un ateo. Y este sujeto le dice: "Usted no puede ser un ateo, usted es demasiado bueno". Por lo que pienso que esto habla por sí mismo. Y esa es una manera que yo soy… cuando los comunistas fueron los que vinieron en mi ayuda en mi hora de desespero, cuando ellos [la policía] mataron a mi hijo, los comunistas fueron los primeros que vinieron en mi ayuda. Los únicos que vinieron ayudarme. Por lo que esto me dijo algo de la clase de personas que son. Y después les dije a ellos que yo creía que "los comunistas eran nazis" y simplemente se trataba de que él me explicara y que yo leyera.
Revolución: Cuando dices "él me explicara", ¿de quién habla…?
Ju: Ah, mi camarada. Leímos lo que está en el periódico sobre lo que es el comunismo. Esto siempre está en la página 3, tal vez en la página 2. Y estudiando y leyendo historia y cosas. Y adentrándome en el movimiento. Y escuchando a BA hablar y leyendo. Y mucho de esto es estar alrededor de los comunistas, observando sus altos valores, la clase de personas que son, ellos son mejores que los cristianos [risas].
Revolución: También existe el hecho de… la manera en general como BA ha desarrollado una nueva concepción de la revolución y el comunismo, basada principalmente en una defensa de la verdadera experiencia anterior de la revolución comunista a diferencia de las mentiras que mencionas que se le han dicho a la gente, pero también las maneras en que él ha forjado las bases para que lo hagamos mucho mejor la próxima vez… eso refuta en serio lo que son los estereotipos o malentendidos de la gente.
Ju: Nosotros le decimos a la gente… porque muchas personas nos dicen: "El comunismo, se aplicó y luego fracaso", y les explicamos a ellos del nuevo comunismo y la nueva síntesis.
Revolución: Tal vez puedes hablar un poco más de cómo ha sido para ti estar en esta gira, llevando a BA a las masas y estar organizando a la gente en este movimiento para la revolución.
Ju: La gira ha sido magnifica. He conocido a muchas personas y estoy aprendiendo otras formas de hacer el trabajo. Hacemos lo que podamos en casa. He aprendido otras cosas que puedo llevar a donde vivo. Como la idea de la recaudación de fondos de a centavo. Porque recaudar fondos es siempre algo difícil, especialmente cuando vamos a los vecindarios oprimidos, muchas veces la gente no tiene. Me gusta las tarjetas de las 12 maneras de atraer a todos, dejándoles saber a todos que tienen un rol, aun si no hay dinero, o si no salen a la calle, no obstante hay cosas que pueden hacer. Y creo que también es una manera de unir a las personas. Pero significa mucho. Y veo muchas diferencias en algunas cosas y después veo muchas similitudes. Como la gente en los proyectos de vivienda, veo muchos de los mismos problemas en los proyectos de los que veo en de vuelta a donde vivo, con las autoridades y todas las cosas. Conocí a una señora que me dijo que no le permitían pararse en el corredor. Y tenemos un proyecto donde vivo donde no se le permite a la gente sentarse al frente en el porche. Por lo que veo muchas similitudes en la brutalidad de esto y la opresión y todo. Y no hay muchas cosas que siempre son distintas excepto que aquí está en una escala mucho más grande. Creo que muchas actitudes de la gente aquí son similares a lo que veo donde vivo.
Revolución: ¿Puedes decirnos más sobre esto?
Ju: Medio esto me hace sentir que las personas son lo mismo no importa donde vayas [risas]. El interés fue casi el mismo como lo experimentamos nosotros. Aquí, hay más gente, hay todo un montón de gente. Hay más cosas que están sucediendo aquí. Existen muchas más cosas que están pasando como el día que CD [Carl Dix] vino a los multifamiliares, en la siguiente esquina había un festival de los viejos. Entre más encuentre lugares donde se reúne la gente, esto ayuda para hacer el trabajo. Muchas más cosas están pasando aquí, muchas más oportunidades. Pero tenemos que hacerlo aquí, también tenemos que hacerlo en lugares pequeños. Tenemos que transformar al pueblo y tenemos que ir donde quiera que esté la gente.
Revolución: En términos de dar gran salto mediante esta gira en este movimiento para la revolución: como se señala en la cobertura del periódico Revolución, como lo dijiste antes, objetivamente la dirección de BA representa una salida y representa una manera en que la humanidad puede hacer en serio la revolución cuando sea el momento indicado y librarse de todos los horrores de este sistema y alcanzar un mundo diferente. Objetivamente, eso es lo que BA y la nueva síntesis del comunismo representan, pero el número de personas que conocen esto y están organizadas en este movimiento para la revolución a fin de hacer la revolución para alcanzar ese mundo, ese número es aún muy pequeño. Así que [¿qué piensas sobre] esta gira, en términos de cambiar eso y en serio dar un gran salto?
Ju: Creo que la gira ha importado mucho y con la unión de grupos de personas de diferentes lugares y una convergencia de todos en las calles, yo creo que eso importa muchísimo. Y creo que esto importa mucho cuando la gente nos ve como uno, con las camisetas y demás. La camiseta… nos conecta a todos nosotros y creo que esto hace ver al movimiento aún más grande al salir todos nosotros así. Se ve mejor cuando un grupo de nosotros salen del autobús que caminen arriba a abajo dos o tres personas por la calle en el vecindario. Esto despierta más el interés, así lo veo.
Revolución: Tal vez puedas compartir algunas experiencias o anécdotas de esas que las personas que viven en los proyectos cuentan. Dices que ves una conexión entre las condiciones de las personas aquí en esos proyectos y con lo que conoces donde vives. Para las personas que este sistema aplasta completamente, las que no saben que existe una salida, cuando conozcan de esta revolución y su dirección ¿cómo ha sido eso?
Ju: Esto ha sido bueno porque he hablado con varias personas… hasta dicen: "No hay nada que usted pueda hacer", y al hablar con ellos, dejan de pensar de ese modo. Una mujer en particular que dice: "Si uno cría a sus hijos de la manera correcta y éstos hacen lo que uno les dice, pues nada les pasará". Y después de hablar y hablar, ella admitió que ese no es el problema, y se dio cuenta de que el problema es el sistema y que sus hijos pueden resultar afectados al igual que otros aunque hagan las cosas correctas. Yo pienso que eso importaba y con muchos de nosotros estando ahí, eso nos da unos pocos minutos más para luchar con la gente. Porque algunas veces pienso que no hay suficiente tiempo para un pequeño grupo de personas que salen a los vecindarios. Me gustó ese aspecto de eso, de que haya más de nosotros. Mientras estoy ocupada hablando con esta mujer por 15 ó 20 minutos, pues alguien más habla con otros. Así que eso era emocionante, a diferencia de dos personas que salen y pasan 20 minutos o más hablando con una persona. Pues, algunas gentes así se ponen categóricas sobre lo que creen y es necesario dar la lucha y convencerlas para que vean las cosas desde otro ángulo y que se hablen con sinceridad. No creo que sean insinceras, creo que simplemente, pues no han conocido de la revolución, es probable que eso sea el problema.
Revolución: Como resultado de participar en la gira, ¿consideras que ahora ves algunas cosas desde otro ángulo, que éstas te han abierto los ojos a otro camino o sobre las que piensas con aún mayor profundidad?
Ju: Sí, he sacado muchas lecciones y he aprendido muchas cosas de las que considero que puedo beneficiar donde vivo. Por ejemplo, eso de contribuir a difundir el nombre de BA, pienso en el coro que creamos, ése definitivamente llevaré a donde vivo. Los coros siempre llaman la atención. Es buena la idea de recaudar de a centavos, eso de recolectar fondos y participar en la difusión de los libros y cosas. Aprendí algunas cosas, algunas ideas que ayudarán donde vivo, a hacerlo aun mejor.
Revolución: Supongo que la última pregunta que te plantearé por ahora, y luego, claro está, que tengas la libertad de agregar lo que quieras, sería la siguiente: una metáfora que se ha manejado es que hay personas en la gira del autobús, pero además hay personas por todo el país que están empujando el autobús como forma de apoyo. Me pregunto, para aquellos que están empujando el autobús como forma de apoyo, o aquellos que todavía no lo hacen pero que tienen que hacerlo, ¿qué les dirías?
Ju: Bueno, les diría "muchas gracias" a aquellos que ya lo están empujando. Las donaciones han sido fenomenales: de comida, me sorprendió que hubiera tantas donaciones. Eso es lo que se necesita, Por eso me gustan las tarjetas de 12 maneras, porque todos podrán ser parte de esto. Todos. Esa tarjeta explica que uno podría hacer un gran aporte o un pequeño aporte, pero se necesitan y aprecian todas las contribuciones. Les diría: Siguen empujándolo [se ríe].
Revolución: ¿Y qué de las personas que acababan de conocer de esta gira, que vienen descubriéndola o las personas que la gira todavía no ha conocido pero las que sí conocerá y que verán las maneras de conectársele y relacionarse con la gira?
Ju: Digo que sigamos con la gira por un año. [se ríe] Que sigamos yendo de ciudad en ciudad y difundiendo BA por todos lados. Que sigamos sumando a más voluntarios. Esa es una forma importante de correr la voz acerca de la revolución y de poner BA en todas partes, que las personas conozcan lo que nosotros ya sabemos acerca de BA y acerca de la revolución. Lo que nosotros todavía vamos aprendiendo, pues.
Revolución: ¿Tienes algo más que quieres mencionar? ¿Algo que no le pregunté pero que quieres comentar?
Ju: No, para repetir, me alegro haber podido participar en la gira y ser parte de hacer la historia. Quisiera ver que la gira continuara. No me parece que sean suficientes dos semanas o dos meses. Creo que tiene que seguir desarrollándose. [se ríe]
Referencias
Coalición 22 de Octubre www.october22.org
Proyecto Vidas Robadas www.october22.org/StolenLivesProject.html
La Campaña BA en Todas Partes revcom.us/BAfundcampaign/index-es.html
No existe ninguna "necesidad permanente" de que la situación sea así. Es posible forjar un mundo radicalmente diferente y mejor por medio de la revolución, de Bob Avakian revcom.us/avakian/no_permanent_necessity/index-es.html
Revolución: por qué es necesaria, por qué es posible, qué es, una charla filmada de Bob Avakian, que se puede ver en línea o pedir como juego de 4 dvd revolutiontalk.net
Lo BAsico 1:13: "No más generaciones de nuestra juventud, aquí o a través del mundo, cuyas vidas se acaban, cuyo futuro ya está sellado, que han sido condenados a una muerte temprana o a una vida de miseria y brutalidad, que el sistema ha destinado a opresión y al olvido incluso antes de que nazcan. Yo digo no más de eso". — Lo BAsico, de los discursos y escritos de Bob Avakian, RCP Publications, 2011
Esta nueva síntesis… revcom.us/i/188/188new_synthesis-es.pdf Vea también Lo BAsico 2:31.
12 maneras en que USTED puede ser parte de construir el movimiento para la revolución, ahora mismo revcom.us/BAfundcampaign/twelve_ways-es.html
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