Garth Brooks, Ferguson y llegar a ser libre
2 de febrero de 2015 | Periódico Revolución | revcom.us
De un(a) lector(a)
Les escribo para compartir unas notas e ideas sobre lo que representa la decisión del artista de música country Garth Brooks de cancelar apariciones en muchos medios establecidos tras la negativa del gran jurado en Ferguson de acusar al policía que asesinó a Michael Brown, y la ola de protestas que estalló. Garth explicó las cancelaciones en Facebook así: “Pasar el día promoviendo lo nuestro como si no pasara nada malo me parecía repugnante”.
He aquí algo de contexto para los que no lo conocen: Garth Brooks es, con mucho, el artista de country (música tejana) de mayor superventas de todos los tiempos. Su álbum de cantante solista tiene el segundo lugar en ventas en Estados Unidos (rebasando a Elvis Presley) y su gira actual —la primera en más de una década— tiene un éxito extraordinario, potencialmente la gira de mayor venta en bruto de cualquier músico. Las apariciones en los medios de comunicación que él canceló eran para promover su gira y nuevo álbum y no es una decisión ligera dejar plantado al Tonight Show cuando uno está por lanzar una gira mundial y un álbum.
No voy a decir nada nuevo en el análisis de la cultura popular al comentar que, si bien existe una variedad de tendencias y estilos dentro de la música country, es una música que en abrumadora medida refleja la experiencia, atrae, y es creada por, gente blanca. Eso es el contexto de la enorme controversia cuando él canceló esas apariciones — y usó el término “disturbios sociales” para describir las protestas (en vez de términos más hostiles).
En las redes sociales la reacción incluía furia pro-policía contra Garth Brooks. No vamos a repetir ese odio aquí, sólo decir que era serio y fascista. También incluía desacuerdo angustiado de parte de personas que se han tragado el cuento sobre la gente negra en general y las mentiras y calumnias contra Michael Brown específicamente (“Con todo respeto, Sr. Brooks, no son disturbios sociales. Se trata de amotinar, saquear y trastornar el comercio y el transporte. El Sr. Brown era un ladrón intimidador que abusaba de personas y negocios más débiles. Atacó a un oficial de la ley que cumplía con su trabajo legal”.)
También, no faltan las respuestas positivas, como: “Garth, si todos escucharan a “Seremos libres’ y ‘Gente amando a gente’ y se guiaran por lo mismo, el mundo sería tanto mejor. ¡Un abrazo, carnal!”
“Gente amando a gente” es una canción que Garth Brooks lanzó junto con su gira mundial actual. Si uno busca en YouTube “Garth Brooks People Loving People live AMA”, puede ver una de las varias versiones en vivo ahí. Se capta el mensaje y el espíritu de la canción en estas líneas:
Tememos lo que no entendemos
Y hemos tenido miedo desde siempre
Todos los colores y las culturas giran a nuestro alrededor
Una adivinanza enredada, es tan sencilla la solución...
Es gente amando a gente
Es el enemigo de todo mal
La otra canción de Garth Brooks a la cual alude el comentario en Facebook, “Seremos libres,” la co-compuso Garth Brooks como respuesta a la rebelión de Los Ángeles de 1992, tras la exoneración por el sistema judicial a los policías que a golpes dejaron a Rodney King al umbral de la muerte:
Cuando el último niño llore por un pancito
Cuando el último hombre muera sólo por lo que ha dicho
Cuando el más pobre se aloje bajo un techo
Seremos libres
Cuando lo último que notemos es el color de la piel
Cuando lo primero que veamos es la belleza del alma
Cuando se purifiquen de nuevo el cielo y el mar
Seremos libres
(Mi versión favorita de esta canción es un cover hecho por Sam Moore en su álbum “Furor por la noche” con Paul Rogers). Es interesante —especialmente por su tiempo, 1992— que “Seremos libres” incluya la línea “Cuando seamos libres de amar al que quisiéramos...”, un llamado por la igualdad y respeto para relaciones del mismo género. Sólo en los últimos meses, por primera vez, artistas country masculinos exitosos se han declarado gay.
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Existe una polarización aguda que se intensifica en la sociedad —un abismo en la opinión pública— a partir de Ferguson. Cuando los oprimidos se levantaron, provocaron muy ampliamente a que las personas—no solamente negros— le hicieran frente y desafiaran a la supremacía blanca y la brutalidad policial. Y en el lado opuesto del espectro, fascistas frenéticos de los policías “rasos” neoyorquinos montaron protestas contra el alcalde, y racistas blancos corrieron a comprar armas, acicateados por medios de comunicación fascistas “de la corriente principal” como Fox News.
En ese contexto, Garth Brooks se negó a echar leña a la hoguera de odio racista, y tomó una buena posición — una que todos que conocen la historia completa captan como solidaria, por lo menos en ciertas formas, con los que se levantaron. Qué a todo dar. Debemos defender lo que hizo.
Además, he aquí un reto a Garth Brooks, y a las personas a quienes les guste su música: Si usted cree en un mundo donde nadie sufra hambre, donde nadie muera “sólo por lo que ha dicho” y donde “lo último que notemos es el color de la piel”, pues sea congruente y sígale hasta donde le lleve esa visión. No se retroceda, no huya a bregar con lo que haga falta para cumplirla, sin importar si le sacara de su espacio de seguridad y comodidad. Haga de revcom.us una parte importante de esa experiencia.
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En los años 1960, yo no era el único joven blanco de los suburbios que escuchaba música country (entre otras cosas) con un afiche del líder de los panteras negras, Huey Newton, en la pared. Por lo que eso arroja una luz sobre la base para una revolución, y el trabajo a hacerse para repolarizar aún más sectores amplios de la sociedad ahora misma respecto a una cuestión (la opresión de los negros) la cual está en la médula de Estados Unidos. Y para intensificar el trabajo para una revolución concreta. Entre más la revolución de verdad se vuelva un factor que tener en cuenta, más puede determinar el marco en la sociedad en su conjunto y ser un polo de atracción para lo mejor que nazca en todas partes, entre ellas unos lugares sorprendentes.
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