El VERDADERO plagio en la Convención del Partido Repúblicano: Giuliani evoca a Hitler
3 de agosto de 2016 | Periódico Revolución | revcom.us
El Club Revolución presenta una orden de arresto para Rudy Giuliani. (Foto: Especial para revcom.us)
19 de julio de 2016. Al cierre de esta edición, la prensa grande está enfocada en el hecho de que parte del discurso de Melania Trump ante la Convención del Partido Republicano fue plagiado del discurso que Michelle Obama pronunció en la Convención del Partido Demócrata del 2008. Pero se le escapó por completo el mayor plagio de la noche: justo antes del discurso de Melania Trump, Rudy Giuliani —el orador principal sobre el plan de Trump para “Proteger la Seguridad de Estados Unidos”— plagió su mensaje ENTERO del conjunto de la obra de Adolf Hitler.
En una sociedad decente, a un tipo como el ex alcalde de Nueva York, el intolerante y bocón fascista desde hace mucho, Rudy Giuliani, le hubieran arrestado, juzgado y encarcelado por conspiración en serie para apoyar y encubrir el asesinato de jóvenes negros y latinos, en vez de darle una plataforma por la tele nacional como si fuera una autoridad en otra cosa que no fuera la carnicería y la mentira.
Pero ahí estaba, dando un discurso en la Convención del Partido Republicano y promovido por la prensa grande como autoridad legítima sobre “Proteger la Seguridad de Estados Unidos”. Y se superó a sí mismo promoviendo más terror policial aquí y más terror yanqui en el extranjero.
Bob Avakian: El asesinato policial... y la asesina lógica del juego electoral del presente sistema (en inglés).
Giuliani dijo que Trump haría que Estados Unidos sea seguro del mismo modo que él mantuvo seguro a Nueva York cuando fue su alcalde — y que Trump superaría las divisiones raciales: “ni un Estados Unidos negro, ni un Estados Unidos blanco”.
¿Seguridad? ¿Superar el racismo? ¿No más ataques contra los negros y latinos? Pregúntenle a la familia de Hilton Vega o la de Anthony Rosario, ambos asesinados por la policía de Nueva York cuando Giuliani era el alcalde. O pregúntenle a Abner Louima, un haitiano a quien lo metieron esposado en un radiopatrulla a la fuerza antes de agredirle con radios y puños. En la delegación policial lo llevaron a un baño donde le bajaron los pantalones y lo sodomizaron con el mango de un destapador de inodoros, y le metieron ese mango, cubierto de sangre y heces, en la boca.
Así eran los “tiempos de Giuliani”: un reino de terror contra los negros y latinos y otros de color en que nadie estaba “a salvo” de que lo detengan, de que lo den una paliza, de que lo torturen o hagan cosas aún peores. Entre enero de 1992 y diciembre de 1996, durante el mandato de Giuliani, los policías de Nueva York mataron a 187 personas.
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Y ahora Giuliani —quien ataca al movimiento de Black Lives Matter / La Vida de los Negros Importa alegando que es un grupo que fomenta el odio y echándole la culpa por la muerte de policías— propone que Trump haga por el país lo que Giuliani hizo por Nueva York: llevar el terror policial a nuevas alturas a nivel nacional. Exigió más salvajismo aquí y alrededor del mundo. Mirando directamente a la cámara y agitando el dedo despotricó: “ ¡Venimos por ustedes!”.
Las proclamaciones de Giuliani, llenas de odio, evocaron a algunos de los notorios fascistas de la historia: Adolf Hitler… Benito Mussolini… y Donald Trump.
Cualquier sistema que le ofrezca espacio televisado en prime time a este rabioso lunático nazi para promover a otro lunático nazi para la presidencia, es un sistema que NO tiene legitimidad. Razón más que suficiente —y hay muchísimas más— para tumbar a este sistema en la mayor brevedad posible.
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