El siguiente volante es del blog de la Organización Comunista Revolucionaria, México, descargado el 2 de abril de 2019.
La desaparición de Giselle, el coraje y la participación de la gente contra el sistema patriarcal
| revcom.us
La Organización Comunista Revolucionaria, México, recibió el siguiente volante sobre estas importantes protestas de la iniciativa Fin al Patriarcado y la Guerra Contra las Mujeres.
La dominación masculina (el patriarcado) permea en todo el mundo y oprime a las mujeres en formas muy crueles desde las más sutiles hasta la muerte: feminicidios, violaciones, desapariciones, esclavitud sexual, botín de guerra, tortura sexual, pornografía infantil, golpizas.
Giselle Garrido Cruz de 11 años de edad fue desaparecida cerca de su domicilio, en San Lorenzo Chimalhuacán, Estado de México, el 19 de enero de 2019. Ocho días después, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México informó a los padres que habían encontrado su cuerpo sin vida y con signos de violación en un paraje de Coatepec, municipio de Ixtapaluca, Estado de México.
Familiares de Giselle, vecinos y amigos salen a las calles al día siguiente de la desaparición, realizan un mitin y marchan gritando ¡Giselle te queremos de regreso a casa! Se escribieron cartulinas, se pegaron cientos de volantes en los postes, y lonas con la fotografía de la niña iban al frente de la movilización. Una gran solidaridad se expresó, rompiendo con la idea de que “mientras no me pase a mí”, ese egoísmo se diluyo por los suelos. La manifestación avanzó y se bloqueó una de las paradas del mexibus. En ese lugar Lidia, madre de Diana Florencio, víctima de feminicidio en 2017 también en Chimalhuacán, expresó “Estoy aquí en solidaridad con la familia de Giselle” “Deben buscarla ahora y lo tenemos que hacer nosotros”, y denunció “porque las autoridades no lo van hacer, a mi Diana ellos no la buscaron”; después Elena madre de Lupita Hernández y tía de Evelin Marisol Martínez, niñas de ocho y nueve años desaparecidas en 2017 en la misma zona que Giselle, mencionó “Me uno a la búsqueda de Giselle porque conozco el dolor de perder a una hija y que hasta la fecha en mi caso la policía no me ha informado nada”
Estas valientes denuncias desatan en la gente más furia, enojo e indignación ante este tipo de crímenes, y el actuar de estas autoridades que no son omisas sino criminales: en el feminicidio de Diana Florencio cuando los peritos encuentran su cuerpo tirado en la calle violada y asesinada, reportan el cuerpo como masculino, y fue por la insistencia de la familia que pudieron identificarla. En el caso de Lupita y Marisol denuncia un familiar que cuando acuden a levantar el acta de desaparición la autoridad contesto “No se puede levantar porque se cayó el sistema”, y a dos años de su desaparición su respuesta es “nada”. En el feminicidio de Mariana Lima Buendía en 2010 a manos de su pareja y agente de la policía en el Estado de México; el Ministerio Público del Estado de México aseguró que se había practicado la autopsia y resolvió que Mariana se había suicidado, negando todas las pruebas científicas que comprobaban que había sido un feminicidio. Y en el caso de Giselle cuando la familia acudió a reportar su desaparición ese mismo sábado los retuvieron por más de cinco horas y la respuesta fue “La alerta AMBER se emitirá hasta el día lunes porque hoy ya es domingo”; cuando se les solicita los videos de las cámaras públicas instaladas por donde pasó Giselle la respuesta fue “No sirven”. En todos estos casos se muestra el actuar sistemático de las autoridades que tratan de ocultar los feminicidios, las desapariciones de mujeres y niñas, criminalizan a las mujeres violadas y persiguen a las familias y encubren a los criminales.
Las acciones combativas de la gente y la denuncia decidida de los familiares indignaron y movilizaron a muchos más como los amigos de primaria de Giselle en una segunda marcha que partió del Puerto a la Procuraduría de Justicia del municipio. En las redes sociales la noticia de la desaparición de Giselle se había viralizado; medios de comunicación llegaron hasta Chimalhuacán para documentar el caso; en las calles se desenmascaró el actuar criminal del Estado y sus instituciones patriarcales. La verdad es que se NECESITA MÁS DE ESTO, se necesita seguir y extender cada vez más estas protestas y la denuncia amplia de los crímenes contra las mujeres, apoyándonos en la gente y actuando de manera independiente del sistema y sus instituciones esto puede agitar a la sociedad y crear las condiciones de una gran condena social hacia los perpetradores de estos ataques misóginos, que incluye al Estado y sus sistema. Un contingente importante de Chimalhuacán se solidarizó con la marcha del 26 de enero por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en la Ciudad de México donde se unió con otras familias de mujeres desaparecidas y asesinadas. Todo esto forzó a las autoridades a buscar a Giselle y a presentar a un presunto culpable. Exigimos castigo sobre pruebas científicas que comprueben la culpabilidad del detenido, no falsos culpables.
¡ATREVÁMONOS A LUCHAR POR PONER FIN AL PATRIARCADO Y LA GUERRA CONTRA LAS MUJERES!
Fin al Patriarcado y la Guerra Contra las Mujeres, Movimiento Popular Revolucionario, Norma Esther Andrade; Víctor Rogelio Caballero Sierra, Colectivo Aequus.-Promoción y Defensa de Derechos Humanos y Coordinación de Familiares de Estudiantes Victimas de la Violencia; Justicia para Diana.