La nefasta situación para los prisioneros políticos en Irán y la urgente necesidad de que haya protestas por todo el mundo
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Mientras el régimen islámico de Irán se preparaba para acelerar una nueva ola de represión despiadada, Amnistía Internacional (AI) sacó un informe detallado, “Trampling Humanity: Mass Arrests, Disappearances and Torture Since Iran’s 2019 November Protests” [Pisoteando a la humanidad: detenciones en masa, desapariciones y torturas en Irán desde las protestas de noviembre de 2019]. Un boletín de prensa sobre el informe se inicia con estos puntos sobre la situación:
- Tortura generalizada que incluye golpizas, latigazos, toques eléctricos, posturas de estrés, simulacros de ejecución, submarinismo, violencia sexual, administración forzada de sustancias químicas y privación de atención médica.
- Cientos de personas sometidas a juicios manifiestamente injustos por cargos de seguridad nacional infundados.
- Penas de muerte dictadas sobre la base de “confesiones sacadas con tortura no comprobadas”.
Lo que sigue es una instantánea, la punta del iceberg, para dar una indicación de la escala y el alcance de la horrorosa ola de represión emprendida por el régimen teocrático en Irán en los últimos dos meses.
Desde la publicación del citado informe de Amnistía Internacional, la situación se ha vuelto cada vez más funesta con un aumento alarmante de las penas de muerte dictadas y ejecutadas rápidamente en los casos de prisioneros políticos en los últimos meses. Se celebró una reciente protesta internacional de masas a raíz del ahorcamiento del 12 de diciembre del bloguero y periodista disidente Rouhollah Zam, de 47 años. El régimen de la República Islámica de Irán (RII) lo persiguió por informar favorablemente sobre las protestas en Irán en 2017 y 2019. Rouhollah Zam había estado viviendo en el exilio en París desde 2011, pero fue atraído con artimañas a Irak, donde fue secuestrado y llevado a Irán en octubre de 2019, encarcelado y sometido a un juicio simulado que incluyó una confesión sacada a tortura para amarrar su pena de muerte, aunque su padre es miembro del régimen de la RII.
La categoría de prisioneros políticos es muy amplia. La racha de represión del régimen iraní en el mes de octubre afectó a ambientalistas, estudiantes, miembros de nacionalidades minoritarias (por ejemplo, kurdos, árabes, etc.), activistas por los derechos de las mujeres, maestros y profesores, activistas y organizadores del movimiento sindical, artistas, intelectuales, periodistas y casi cualquier persona que pueda considerarse que se opone al régimen de alguna manera, y a menudo sobre la base de pruebas fabricadas o confesiones sacadas a tortura.
El Centro de Derechos Humanos en Irán (CHRI) informó la semana pasada que la RII ha intensificado muchísimo las ejecuciones de prisioneros políticos. Por ejemplo, tres jóvenes hombres baluchis* acusados de pertenecer a grupos musulmanes sunitas militantes fueron ejecutados el 23 de diciembre. Es posible que haya varios más esperando este mismo destino. Las ejecuciones se llevan a cabo aunque los abogados defensores están tramitando apelaciones de las condenas de sus defendidos.
Según el sitio web del CHRI, también a finales de diciembre, la RII aceleraba la persecución a los miembros de la Asociación de Escritores Iraníes (IWA), como con la detención del poeta Amin Moradi. Sus abogados defensores sospechan que pronto será acusado de los acostumbrados cargos de “seguridad nacional”. Su arresto ocurre después del encarcelamiento en octubre de 2020 de tres miembros de alto rango de la IWA, también por cargos falsos después de juicios injustos.
A finales de noviembre, tanto AI como el CHRI destacaron el caso de Nahid Taghavi, prisionera política 66 años de edad, de nacionalidad doble alemán-iraní y activista por los derechos de las mujeres. Ella fue detenida en la casa de sus padres en Teherán el 16 de octubre y mantenida en régimen de aislamiento, privada de visitas de familiares o abogados, de necesarios medicamentos y atención médica. El informe de AI hacía sonar una alarma de que el régimen la estaba torturando. A mediados de diciembre, la BBC destacó el destino peligrosamente incierto de varios ciudadanos con doble nacionalidad que se encuentran ahora en las prisiones de la RII, incluida la de Taghavi así como de muchas otras.
El citado informe detallado de AI de septiembre contiene ilustraciones espantosas de algunas de las técnicas de tortura utilizadas por la RII — que traen a la memoria las fotos de las propias técnicas de tortura de Estados Unidos, tal como en la prisión de Abu Ghraib de Irak, en la base estadounidense de Guantánamo, Cuba y numerosos “lugares negros” secretos [centros clandestinos de detención] de la CIA que están regados por todo el mundo. Parafraseando al cineasta Jeff Kaufman (Nasrin), en sus comentarios durante la mesa redonda de PEN/Ms. sobre su película, la respuesta que se requiere a la represión de la RII NO es que Estados Unidos ataque a Irán. Es decir, hay que oponerse al horror perpetuado por la RII sobre el pueblo iraní, y hay que oponerse a cualquier amenaza o maniobra de guerra o sanción cruel de Estados Unidos contra Irán, sobre todo por personas en Estados Unidos.
Como dice Bob Avakian en la obra seminal Forjar otro camino:
Lo que vemos en contienda, con la yihad por un lado y McMundo/McCruzada [el imperialismo occidental en creciente globalización] por el otro, son sectores históricamente anticuados de la humanidad colonizada y oprimida contra sectores dominantes históricamente anticuados del sistema imperialista. Estos dos polos reaccionarios se oponen, pero al mismo tiempo se refuerzan mutuamente. Apoyar a uno u otro de esos polos anticuados, acabará fortaleciendo a los dos.
Esta es una formulación muy importante y crucial para entender muchas dinámicas que impulsan el mundo en este período, pero tenemos que tener en claro cuál de “los dos sectores históricamente anticuados” ha causado más daño y representa la mayor amenaza a la humanidad: los sectores dominantes históricamente anticuados del sistema imperialista, y en particular los imperialistas estadounidenses.
Este análisis científico exige que las personas que viven en Estados Unidos actúen de acuerdo a la responsabilidad internacionalista de sumarse activamente a la lucha por un creciente coro de condena a las olas de represión de la RII y por la libertad y la justicia para todos los prisioneros políticos en Irán AHORA, junto con una oposición activa a cualquier amenaza y maniobra de guerra de Estados Unidos contra Irán.
* Estos son los habitantes de la región de Beluchistán en el sur de Irán. Hablan los dialectos rakhshani y sarawani de balochi, un idioma iraní. Sus dos millones de habitantes viven principalmente en terrenos montañosos lo que les ha permitido mantener una identidad cultural distinta como nacionalidad minoritaria en Irán. [volver]
Protesta del 10 de diciembre en Fráncfort, Alemania, en apoyo a los prisioneros políticos en Irán. “¡Basta ya! ¡Ya han asesinado a demasiados prisioneros políticos! La lucha es la vida en sí”.
Actualización sobre la situación con la prisionera política Nahid Taghavi
Este comunicado de prensa es de Marian Claren, hija de Nahid Taghavi, una ciudadana con doble nacionalidad germano-iraní que se encuentra recluida en la prisión de Evin en Irán.
28 de diciembre de 2020:
La salud de mi madre, Nahid Taghavi, se está deteriorando rápidamente. En su última llamada con mi tío el 27 de diciembre, ella le dijo que ahora está tomando metformina, que es un medicamento para la diabetes tipo 2. Durante los últimos tres años, mi madre ha estado controlando con éxito el nivel del azúcar en su sangre por medio de un eficaz programa de dieta y ejercicio que implicaba de dos a tres horas de caminata al aire libre todos los días. Ahora, después de 73 días en confinamiento solitario en la prisión de Evin y el estrés de 73 días de interrogatorios, su diabetes ha vuelto después de tres años. Los médicos dicen que si no se controlara la diabetes de mi madre de 66 años de edad, podría causar daño renal, problemas con los nervios, infarto al miocardio y accidente cerebrovascular. Basta ya. ¡Tiene que ser puesta en libertad de manera inmediata e incondicional!
Cartel con imágenes de los prisioneros políticos en Irán, de la campaña “¡A incendiar la jaula, A liberar a los pájaros!”.