Palestina: Escalada de masacres por Israel, se propaga resistencia de los palestinos
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Nota de la redacción y antecedentes breves: La escalada del conflicto en Palestina e Israel ha dominado las noticias esta última semana. Para obtener más antecedentes sobre el estado de Israel, su historia y su naturaleza como un estado colono reaccionario y su opresión al pueblo palestino, el apoyo del imperialismo de Estados Unidos y puntos básicos de orientación y análisis, haga clic aquí.
El 13 de abril, hace un mes, agentes de la policía israelí entraron en la mezquita de Al-Aqsa en Jerusalén y cortaron los cables de los altavoces que transmitían oraciones, aparentemente para evitar interferencias ruidosas contra otro evento oficial cercano. Este fue el comienzo del Ramadán, el mes sagrado para los musulmanes, y Al-Aqsa es uno de los lugares más sagrados de esa religión. Esto dio inicio y provocó una serie de sucesos cada vez más intensos con resistencia, rebelión y acciones de los palestinos contra la ocupación israelí; represalias y respuesta israelíes escandalosamente desproporcionadas, por parte del ejército y la policía oficiales, y ataques de turbas sionistas. En comparación con los ataques israelíes anteriores contra los territorios palestinos de Gaza y Cisjordania, estos ahora han envuelto a zonas dentro del propio Israel, especialmente en zonas con poblaciones árabes palestinas.
Al cierre de esta edición, Israel está intensificando los bombardeos indiscriminados en masa y la matanza contra el pueblo palestino en Gaza1 en sus hogares y comunidades. Entre los muertos hay decenas de niños. En Cisjordania2 y en Israel, la policía y las turbas fascistas hacen sus desmanes. El pueblo palestino continúa protestando de manera desafiante contra estos ataques y maniobras para limpiar étnicamente a Jerusalén, una de las principales ciudades.
A diario aumenta el saldo de muertos por los ataques israelíes
Como escribimos la semana pasada, después de que las autoridades israelíes atacaran a manifestantes contra los desalojos y fieles musulmanes en Jerusalén, el régimen de Hamás que controla Gaza y otras fuerzas islamistas ahí, lanzaron ataques con misiles de baja tecnología contra Israel. Hamás es una organización yihadista fundamentalista islámica reaccionaria que no representa nada liberador para el pueblo palestino. Pero lo que está sucediendo no es un “intercambio equitativo” de ataques con misiles. Los rudimentarios misiles de Hamás no son comparables a la masiva maquinaria de muerte de tecnología de punta de Israel y el saldo de muertos en los ataques con misiles que Israel masacra de manera masiva y desproporcionada a los palestinos en Gaza. Israel tampoco puede reclamar “autodefensa” cuando ha bloqueado, hambreado y atacado a Gaza durante años (véase, por ejemplo, aquí y aquí).
El 16 de mayo fue el día más mortífero en una masacre en curso que ha causado la muerte de al menos 188 personas en Gaza. Durante días, los palestinos que viven a lo largo de las fronteras norte y este de Gaza con Israel han estado huyendo de los intensos bombardeos israelíes y terminaron en refugios temporales en el centro de la Ciudad de Gaza. Familias que ya estaban luchando por sobrevivir en una enorme prisión al aire libre, Gaza, donde Israel ha puesto bajo encierro a más de dos millones de personas, llegan a diario en camionetas, burros y a pie. Miles se han refugiado en dieciséis escuelas administradas por las Naciones Unidas, pero en masacres anteriores contra la gente de Gaza, Israel ha atacado escuelas administradas por agencias europeas y la ONU con bombardeos con niños dentro o cerca.
El 15 de mayo, cazas israelíes bombardearon una casa de tres pisos en el campo de refugiados de Shati en la ciudad de Gaza y mataron a ocho niños menores de 14 años y a dos mujeres de una familia extendida. Los 1.5 millones de palestinos que viven en campos de refugiados son familias expulsadas de Israel durante la Nakba, la racha de limpieza étnica terrorista de Palestina que “despejó el terreno” sobre el que se construyó el estado de Israel en 1948.
El 14 de mayo, Rafat Tanani, su esposa embarazada y sus cuatro hijos, de 7 años o menos, resultaron asesinados después de que un avión de combate israelí redujera a escombros su edificio de apartamentos de cuatro pisos en la ciudad vecina de Beit Lahia, en el extremo norte de Gaza. “Fue una masacre”, dijo un familiar. “Mis sentimientos son indescriptibles”. En este caso, un portavoz militar israelí le dijo a los medios de comunicación que no había ningún esfuerzo por minimizar el “daño colateral” porque eso no era “factible en este momento”.
Mientras las protestas se extienden por Cisjordania, la frontera libanesa y Jordania, Israel asesina al menos diez manifestantes
En la Cisjordania ocupada, en las afueras de Ramala, Naplusa y otros pueblos y ciudades, los palestinos protestaron contra la masacre en Gaza y las medidas para desalojar a los palestinos de Jerusalén Oriental. Agitaron banderas palestinas, levantaron barricadas de neumáticos en llamas y se defendieron con piedras arrojadas a los soldados israelíes los que balearon y mataron al menos diez manifestantes.
En la frontera norte de Israel, las tropas abrieron fuego cuando un grupo de manifestantes libaneses y palestinos del otro lado cortó la valla fronteriza y la cruzó brevemente. Un manifestante libanés fue asesinado.
La mayoría de las personas que viven en Jordania son palestinos o tienen vínculos estrechos con Palestina y las protestas ahí se han enfrentado con una violenta represión por parte de un régimen jordano amigo de Estados Unidos. El viernes 14 de mayo, la policía antidisturbios jordana atacó a manifestantes pro palestinos que intentaban llegar a un puente que conduce a la Cisjordania ocupada por Israel. Los manifestantes pidieron al gobernante de Jordania, el rey Abdalá, que abra la frontera con Israel para permitir que los palestinos escapen y que la gente de Jordania cruce la frontera para acudir en su ayuda. Y exigieron el fin de la alianza oficial de Jordania con Israel y su reconocimiento diplomático.
Ciudadanos palestinos de Israel se unen a las protestas y son objetivo de un ataque violento.
El sábado 15 de mayo continuaron las protestas en muchas ciudades mixtas judío-palestinas por sexto día, mientras los palestinos observan el Día de la Nakba, que recuerda la limpieza étnica terrorista de Palestina por parte de los sionistas3 en 1948. Los manifestantes también protestaron por la matanza en curso por Israel en Gaza. En ciudades con poblaciones palestinas, la policía atacó y arrestó a los manifestantes utilizando balas con punta de esponja y granadas paralizantes en una clásica confrontación de violencia policial israelí militarizada contra los palestinos que se defendían con piedras.
Hay combates callejeros generalizados en ciudades de Israel con importantes poblaciones palestinas. Si bien se han informado de casos en los que se dice que los palestinos se han aliado contra los israelíes, en la inmensa mayoría de los casos se ha dado una ola de ataques de turbas organizados contra los palestinos por parte de sionistas racistas de derecha, en connivencia con la policía israelí y, en ocasiones, con el apoyo activo de ésta. La negativa de los palestinos a retroceder ante esta situación ha suscitado menciones de una “guerra civil” y ha sacudido fuertemente a la sociedad israelí.
La ciudad de Jaffa, junto a Tel Aviv, es aproximadamente dos tercios de judíos y un tercio de palestinos. El 14 de mayo, un niño palestino de 12 años resultó herido por bombas incendiarias lanzadas contra su casa en Jaffa y permanece en estado grave. Su hermana de 10 años resultó herida en la cabeza. El padre del niño le dijo al periódico Ha’aretz que la familia estaba sentada en la sala de estar “cuando la casa fue alcanzada y el fuego comenzó a entrar por la ventana”. El abuelo del niño dijo que la policía le impidió acudir a ayudar y gritó: “¿Cuánto tiempo se quedará así? Y ellos dicen que nosotros somos los terroristas. Nos imponen un encierro en nuestras casas y dejan que los colonos hagan lo que les da la real gana”4. Los vecinos le dijeron a Ha’aretz: “la policía protege a los colonos y los deja entrar a Jaffa. Son milicias que trabajan con permiso de la policía. No tocamos a los judíos que viven aquí y tratamos a todos con respeto”.
El 15 de mayo, cientos de personas se congregaron en un parque de Jaffa para protestar por el ataque. Los manifestantes portaban carteles que decían “¿Dónde está la voz judía cuerda?” Una manifestante, Liza Koma, dijo: “No me siento segura en mi propia ciudad. Se supone que no debo irme a dormir con temores de que me quemen. Nosotros, la comunidad árabe, nos protegeremos”.
Biden defiende la matanza por parte de Israel
El 13 de mayo, cuando Israel estaba en plena masacre en Gaza, los fascistas judíos racistas se desmandaban y la policía israelí baleaba y mataba a los manifestantes con munición real, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio una muestra de apoyo a todo esto, diciendo: “no ha habido una reacción exagerada de importancia” en lo que afirmó fue la respuesta de Israel a los cohetes de Hamás. La realidad es que para los gobernantes de Estados Unidos, ya sean demócratas o republicanos, Israel ha sido y sigue siendo el más confiable baluarte armado e instrumento para imponer los intereses imperialistas estadounidenses en esta región del mundo estratégicamente crucial. Por eso, como señaló Bob Avakian en Forjar otro camino, Israel desempeña un “papel especial” y continúa recibiendo un respaldo firme (incluidos miles de millones de dólares en ayuda al año) de Estados Unidos.
Al mismo tiempo, se ha suscitado una importante ira contra esta situación en la población en Estados Unidos, con varias manifestaciones en las calles y muchas figuras públicas que se pronuncian contra los ataques israelíes y el papel general israelí en la región. Los revolucionarios han entrado en esta efervescencia, y han explicado que la fuente del problema está dentro del propio sistema imperialista y han estado organizando a la gente para la revolución, mientras se unen en esta lucha contra lo que el sistema está perpetrando en el Medio Oriente. Estén atentos a revcom.us para obtener más cobertura, análisis y orientación.
1. Gaza es una pequeña franja de territorio de 10 k de ancho por 40 k de largo. Está habitada por más de dos millones de palestinos, refugiados (con sus hijos y nietos) que fueron expulsados de sus hogares en la limpieza étnica de Palestina (conocida como Nakba, árabe para “catástrofe”) en 1948 que resultó en el establecimiento del estado de Israel. A Gaza se le suele llamar “la prisión al aire libre más grande del mundo”. Tanto Israel (que rodea en gran parte a Gaza por tierra y mar) como Egipto (con quien Gaza comparte una corta frontera terrestre) en esencia han encerrado a la gente en Gaza. Los niveles de pobreza son extremadamente altos y más de la mitad de la población de Gaza tiene “inseguridad alimentaria de moderada a grave”, según la ONU. [volver]
2. Cisjordania, junto con Gaza y el propio Israel, formaban parte de la Palestina histórica, donde el pueblo palestino había vivido durante muchos siglos. Con el establecimiento del estado colonial colono de Israel en 1948, se apoderó del 77 por ciento de la Palestina histórica, con el respaldo de Estados Unidos y otras potencias. En 1967, en una guerra de agresión, Israel se apoderó del 23 por ciento restante de la Palestina histórica. En la actualidad, la Cisjordania ocupada alberga a más de 2.5 millones de palestinos, muchos de los cuales viven en campos de refugiados. También hay más de 200 asentamientos israelíes oficiales y no oficiales que se han apoderado de tierras de los palestinos, con cientos de miles de colonos israelíes, todo ello ilegal según el derecho internacional. Estos asentamientos, barreras y las carreteras exclusivas para colonos judíos que los conectan con Israel son instrumentos de limpieza étnica: cercan, aíslan y literalmente amurallan lo que son cada vez más enclaves de campos de concentración donde los palestinos están confinados. Muchas son bases esencialmente militarizadas desde las que racistas virulentos llevan a cabo un reino de terror sobre la población palestina. [volver]
3. El sionismo es un movimiento político e ideológico imperialista colonialista abiertamente pro-occidental en la población judía fundado con el objetivo de establecer un estado-nación judío. Para conocer más, vea aquí. [volver]
4. En la imagen: el orador se refiere a los sionistas que se trasladan a ciudades, pueblos y vecindarios palestinos en Israel, que intimidan, aterrorizan y tienen como objetivo expulsar a la población palestina. [volver]
Israel bombardea oficinas de Prensa Asociada y Al Jazeera: Un crimen de guerra para borrar crímenes de guerra
El 15 de mayo, aviones israelíes bombardearon y demolieron un edificio de 11 pisos que albergaba las oficinas de Associated Press (AP), un importante servicio noticiero con sede en Estados Unidos, y donde también están las oficinas del servicio noticiero Al Jazeera con sede en Qatar, así como otras oficinas y apartamentos. Durante 15 años, las oficinas de AP, ubicadas en el último piso con una terraza, eran un importante lugar para cubrir los ataques de Israel a Gaza, como los de 2009 y 2014. Los reportajes de AP y Al Jazeera desde este edificio han sido una de las principales formas en que la gente de todo el mundo ha podido presenciar y captar una idea del impacto infernal de las pasadas y actuales masacres israelíes en Gaza.
En una declaración, el jefe de AP dijo: “El mundo sabrá menos sobre lo que está sucediendo en Gaza debido a lo que sucedió hoy”. Ese es el resultado previsto.
Se supone que los periodistas están protegidos bajo el derecho humanitario internacional de ataques directos a menos que estén participando directamente en las hostilidades. Tales ataques constituyen crímenes de guerra. La destrucción del edificio entero que albergaba las oficinas de AP envía un mensaje de que Israel se declara exento de las leyes internacionales más aceptadas que rigen la conducta de los ejércitos durante una guerra, incluidas las que exigen proporcionalidad en los intercambios militares, y las que prohíben ataques contra la prensa.
Matanza indiscriminada de civiles = doctrina militar israelí
El 15 de mayo, aviones israelíes bombardearon una casa de 3 pisos en el campo de refugiados de Shati en la Ciudad de Gaza, matando a 8 niños menores de 14 años y 2 mujeres, todos parientes. Los cientos de miles de personas que viven en campos de refugiados, son o son los descendientes de personas expulsadas de Israel durante la Nakba: la racha de limpieza étnica terrorista de Palestina que “despejó el terreno” sobre el que se construyó el estado de Israel en 1948.
De hecho, la matanza indiscriminada de civiles es una parte fundamental de la doctrina militar israelí. Desde la Nakba, esta doctrina se ha intensificado y se ha expresado explícitamente como un elemento esencial de la estrategia militar israelí. Un artículo de 2008 en la revista del Instituto Israelí de Estudios de Seguridad Nacional, “Disproportionate Force: Israel’s Concept of Response in Light of the Second Lebanon War“, comenta públicamente sobre esto y la lógica genocida que lo defiende.
Escrito 15 años después de la brutal y fallida invasión y ocupación israelí del Líbano, el artículo resume las lecciones que los líderes políticos y militares israelíes aprendieron de eso:
Israel no tiene que ser arrastrado a una guerra de desgaste con Hizbulá [también escrito Hezbolá, la milicia islamista que fue el objetivo de la invasión israelí del sur del Líbano]. La prueba para Israel será la intensidad y la calidad de su respuesta a incidentes en la frontera libanesa o ataques terroristas en que esté involucrado Hizbulá en el norte o Hamás en el sur. En tales casos, Israel nuevamente no podrá limitar su respuesta a acciones cuya gravedad sea aparentemente proporcional a un incidente aislado. En lugar de eso, tendrá que responder de manera desproporcionada para dejar muy claro que el Estado de Israel no aceptará ningún intento de alterar la calma que prevalece actualmente a lo largo de sus fronteras. Israel debe estar preparado para el deterioro y la escalada, así como para un enfrentamiento a gran escala. Esta preparación es obligatoria para evitar el desgaste a largo plazo. [Énfasis agregada]
La doctrina y la moral (o la falta de la misma) de cualquier fuerza militar es una concentración de sus objetivos y valores. Y en el caso de Israel, esos objetivos son los de un racista estado colono que desempeña un papel crucial de ejecutor de los intereses de Estados Unidos en un mundo de explotación y opresión, y sus valores justifican cualquier cosa que sirva a los intereses del imperio estadounidense y de nuestro pueblo (o sea, los israelíes), y ningún crimen contra la humanidad es demasiado abominable.