Sobre el asesinato de Soleimani por Estados Unidos y el mayor peligro de la guerra:
Oponerse a la agresión imperialista de Estados Unidos — ¡Trump-Pence fuera ya!
Actualizado el | revcom.us
4 de enero de 2020. El asesinato del general iraní Qasem Soleimani por Estados Unidos ha estremecido al mundo. Soleimani era el comandante de la Fuerza al-Quds, una fuerza del gobierno iraní que comanda a las milicias en diferentes países de la región. El asesinato de un alto funcionario del gobierno de un estado soberano en el territorio de otro estado soberano es objetivamente un acto de guerra por parte de Estados Unidos. Este asesinato pondrá en marcha una espiral de ojo por ojo que conlleva graves peligros para la gente de esa región y del mundo en su conjunto.
Para que quede claro: Soleimani era un carnicero de larga trayectoria del reaccionario régimen iraní, el que en sí ha cometido verdaderos crímenes contra la gente. Pero la carnicería llevada a cabo por Estados Unidos tan sólo en esa región es ¡mil veces más grande que cualquier cosa con la que Soleimani pudiera haber soñado! Es de importancia crítica que la gente en Estados Unidos se oponga a este acto de guerra de Estados Unidos con acción política de masas.
¿Por qué es que Estados Unidos está llevando a cabo asesinatos y matanzas en masa en el Medio Oriente en primer lugar?
El propósito de la presencia de los soldados y mercenarios de Estados Unidos en el Medio Oriente es el siguiente: dominar a una parte estratégicamente vital del mundo que tiene recursos de petróleo y energéticos. Estados Unidos se propone no sólo saquear esos recursos, sino aún más ganar influencia sobre otras potencias rivales y aliadas como China, Japón y Europa que necesitan de esos recursos (y contender con potencias locales como Irán, que también buscan proyectar su influencia en la región). Para ello, Estados Unidos ha invadido directamente a Irak y Afganistán, ha patrocinado guerras y golpes de estado con títeres y sustitutos en muchos más países y ha llevado a cabo asesinatos con aviones no tripulados por toda la región1. Tan sólo en las últimas tres décadas, millones de personas del común han muerto en esa región a causa de estos conflictos, y la inmensísima mayoría de esos asesinatos están “made in USA”.
Trump ya nos está diciendo que el propósito de ello era “salvar vidas de estadounidenses”. Dejando de lado el verdadero propósito de este asesinato, es decir, luchar por la dominación de toda una región de gente por Estados Unidos, y lo que ese “personal estadounidense” está haciendo ahí en primer lugar (que era actuar como instrumentos dispuestos a cometer las matanzas y brutalidades que implica esa “misión”), señalamos esta verdad fundamental de Bob Avakian: “La vida de los estadounidenses no es más importante que la de la gente de otros países”.
Estas guerras y crímenes de guerra son el producto de un sistema, el capitalismo-imperialismo dominado por Estados Unidos. Este sistema pulveriza a diario la vida de miles de millones de personas por todo el mundo. Las guerras que el sistema libra, generación tras generación, son una gran razón por la que hay que derrocarlo, por medio de la revolución. De hecho, la humanidad no necesita de este sistema — ¡podría vivir de una manera totalmente diferente! Existe una Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte, escrita por Bob Avakian, que establece un plano de la manera en que una sociedad revolucionaria en el camino a la emancipación podría relacionarse con el resto del mundo: acabar con las relaciones de explotación y saqueo y sanar activamente las heridas del pasado y superar las desigualdades de hoy. El hecho de que estos crímenes son innecesarios los hace aún más dolorosos e intolerables.
Choques en la cúpula del poder, oportunidades para la gente
Además de cualquier “efecto boomerang” de distintos tipos que Estados Unidos reciba en el extranjero, también hay oposición en Estados Unidos. El fin de semana del 4 y 5 de enero se realizaron manifestaciones en todo Estados Unidos y es necesario que se realicen más. Las fuerzas en la clase dominante de Estados Unidos que se oponen a Trump (los altos dirigentes demócratas y los medios informativos liberales como la CNN, el New York Times, etc.) están haciendo cuestionamientos. Algunos de ellos se preocupan que este asesinato sea una maniobra impulsiva, sin ninguna estrategia viable, que podría tener resultados contraproducentes en sentidos muy serios para Estados Unidos. Otros señalan la manera en que los aliados, y los adversarios, de Estados Unidos por todo el mundo están oponiéndose a esta situación. Otros cuestionan abiertamente las motivaciones de Trump y señalan todo su historial de ser un mentiroso habitual y egoísta.
En general, esta oposición parte de lo que hará avanzar los intereses de Estados Unidos —es decir, de los imperialistas estadounidenses— en la región, y a menudo se expresa abiertamente según esos términos, y los respectivos voceros por lo general refuerzan la idea de que Estados Unidos representa “los buenos” en la región. Esas ideas son falsas y nocivas y hay que luchar en su contra. Pero estos conflictos también crean más espacios para que otros hagan cuestionamientos y oposición de diferentes tipos.
Todo esto ocurre en el contexto de la impugnación contra Trump y su inminente juicio en el Senado. Sin duda alguna, Trump aprovechará este ataque contra Irán y cualquier conflicto que surja de él para exigir “unidad nacional” en torno a él. Pero quizá esto no sea tan fácil de hacer, especialmente si se propaga la sospecha de que quizá él hubiera ordenado el ataque en parte para servir a su lucha por mantenerse en el cargo.
Para que quede claro: si bien los demócratas en sí son defensores de este sistema criminal y a la larga hay que derrocar a este sistema, el régimen fascista de Trump y Pence representa una amenaza urgente e inmediata a la humanidad —una amenaza que este ataque pone de relieve así como agrava— y hay que expulsar a este régimen, ahora. En este contexto, y especialmente con las actuales divisiones en las fuerzas de la cúpula de la sociedad, si la gente emprende la clase de protesta no violenta, sostenida y masiva que exija la destitución del régimen en su conjunto por la que están luchando Rechazar el Fascismo [RefuseFascism.org] y la campaña ¡FUERA YA! [#OUTNOW!], eso podría cambiar toda la ecuación hacia algo mejor.
Aprehendamos el instante.
¡ESTADOS UNIDOS FUERA DEL MEDIO ORIENTE!
¡FUERA YA EL RÉGIMEN FASCISTA DE TRUMP-PENCE!
¡REVOLUCIÓN, Y NADA MENOS!
1. Vea estos artículos de la serie “Crimen Yanqui” de revcom.us:
- “1953, El golpe de estado en Irán de parte de la CIA: La tortura y la represión — Hecho en Estados Unidos”
- “Noviembre 2004 — Crimen de guerra en Faluya”
- “Las sanciones de Estados Unidos y la ONU contra Irak — ‘Un acto legitimado de matanza en masa’”
- “‘Operación Libertad Iraquí’ de 2003”
- “La guerra del golfo Pérsico de 1991 — ‘Operación Tormenta del Desierto’”
- “La masacre israelí armada y respaldada por Estados Unidos en Gaza (2008-2009)”
- “La guerra de sustitutos de Estados Unidos contra la Unión Soviética en Afganistán, 1979-1988”
- “Las bitácoras de guerra de Afganistán e Irak y la persecución de Chelsea Manning, Julian Assange y WikiLeaks”
- “Matanza en masa en el cielo sobre Irán: El derribo del vuelo de pasajeros 655… por la Armada de Estados Unidos”. [volver]
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De pie en solidaridad con los camaradas revolucionarios en Irán
Si bien nosotros, como revolucionarios en Estados Unidos, acogemos con beneplácito la derrota de nuestros propios gobernantes en cualquier conflicto, también apoyamos al movimiento revolucionario en Irán que tiene como objetivo derrocar a sus propios gobernantes, como parte de emancipar a la humanidad. Este movimiento —dirigido por el Partido Comunista de Irán (marxista leninista maoísta) el que asume el nuevo comunismo desarrollado por Bob Avakian— está luchando para derrocar a sus propios opresores, como parte de la lucha por un mundo completamente nuevo. Tomamos posición con ellos en firme oposición a los ataques de Estados Unidos y a una invasión potencial, y en la lucha para hacer la revolución, a fin de superar todas las relaciones opresivas y desiguales de este mundo, y hacer nacer un nuevo mundo de emancipación humana.