"El núcleo sólido del frente único que el proletariado debe formar bajo su dirección es la alianza revolucionaria del movimiento del proletariado consciente de clase en su totalidad con las luchas de los pueblos negro, chicano, puertorriqueño, indígena y otros pueblos oprimidos, contra el enemigo común: el sistema imperialista y la dictadura burguesa".
Del Programa del PCR,EU
Un aspecto importante de nuestra estrategia es lo que llamamos el "núcleo sólido" del frente único. ¿Qué queremos decir con "núcleo sólido", y cuál es su relación con el Frente Único y con el papel dirigente del proletariado revolucionario consciente de clase dentro de ese frente único y en el movimiento revolucionario en general?
Primero, como base y marco de referencia para esta discusión, sería útil hacer un breve resumen básico del análisis y línea de nuestro Partido sobre la cuestión nacional (y en particular sobre la cuestión nacional negra) y de su relación con la "cuestión clasista", o sea, la lucha revolucionaria del proletariado. Ese análisis y línea se encuentran de forma básica en nuestro Programa, y se ampliaron y elaboraron en el folleto La pura verdad, verdad liberadora (PVVL).
Como dice el Programa, en Estados Unidos hay muchas nacionalidades distintas y cada una tiene sus propias características y problemas que se deben resolver: al pueblo indígena le han robado sus tierras y suprimido su cultura; la opresión del pueblo puertorriqueño en Estados Unidos está estrechamente vinculada con la condición colonial de su patria, la cual debe ser liberada; el pueblo negro vivió la esclavitud y el proceso histórico de su formación como nación oprimida en lo que se llama el Cinturón Negro del Sur; a los chicanos les afecta la opresión estadounidense de México, el robo de sus tierras, el atraso impuesto a gran parte del Sudoeste y la continua persecución de los "ilegales". Aquí quiero enfocarme en la situación del pueblo negro para comprender mejor el concepto del "núcleo sólido".
Una nación oprimida dentro de Estados Unidos
Un punto decisivo de nuestra línea es que el pueblo negro de Estados Unidos no es simplemente un "grupo racial" (o un "grupo étnico") sino una nación oprimida. El desarrollo histórico del pueblo negro como nación oprimida ocurrió y se basó en su opresión común en el "Cinturón Negro" del Sur. El Cinturón Negro (se llama así por el color de la tierra) es la tierra histórica de la nación afroamericana. Hoy día, la gran mayoría de los negros ha sido dispersada de esa tierra histórica: la mayoría de los que todavía viven en el Sur viven en ciudades, algunas de las cuales están fuera del Cinturón Negro; millones han emigrado a centros urbanos del Norte. Sin embargo, los negros siguen siendo una nación oprimida dentro de Estados Unidos y su tierra histórica es el Cinturón Negro.
Los afroamericanos han tenido un desarrollo histórico muy diferente al de la nación dominante (opresora) europeo-americana. No es únicamente su esclavitud directa (cuando eran propiedad de los esclavistas). Aun después de la abolición de la esclavitud, los negros siguieron concentrados en plantaciones, sometidos a una servidumbre semifeudal (la aparcería, en particular). Siguieron encadenados a la tierra por medio de una combinación de relaciones económicas (en particular, los patrones de propiedad de la tierra y su monopolización por dueños blancos, muchos de quienes fueron esclavistas, o sus descendientes) y opresión extraeconómica superestructural (como el terror directo, leyes racistas conocidas como Jim Crow, etc.).
Por medio de todo eso se forjó una nación negra, con las características esenciales de una nación: territorio común, idioma común, vida económica común, cultura común y psicología común. En particular, fue después de la guerra de Secesión, en el crisol de una opresión básicamente feudal, que los negros se forjaron como una nación distinta, una nación oprimida, aparte y dominada por la nación opresora, la europeo-americana. Todas las clases y capas del pueblo negro, no solo las masas básicas, son parte de esa nación oprimida. Dado ese desarrollo histórico, no pueden integrarse a la nación dominante europeo-americana de la misma manera que lo han hecho los inmigrantes europeos. (Lo mismo, o sea, el hecho de que no pueden integrarse a la nación dominante europea, se puede decir de los chicanos y de gran cantidad de inmigrantes latinoamericanos y de otras partes del tercer mundo, en la situación actual de Estados Unidos y de su imperio mundial, aunque, a diferencia del pueblo afroamericano, esos grupos de inmigrantes no constituyen naciones distintas dentro de Estados Unidos.)
Doble opresión
La nación negra (o afroamericana) existe dentro del mismo estado multinacional que otras naciones y nacionalidades en Estados Unidos. Además, y esto es muy importante y fundamental, el pueblo negro es parte, parte esencial, de un solo proletariado multinacional de ese estado (Estados Unidos). No hay diferentes proletariados en Estados Unidos: un proletariado negro, un proletariado blanco o europeo, un proletariado latino (o mexicano, salvadoreño, guatemalteco, nicaragüense), un proletariado filipino, etc., etc., en Estados Unidos. Objetivamente, todos los proletarios de Estados Unidos son parte de un solo proletariado multinacional, aunque existan diferencias y desigualdades, algunas muy pronunciadas y agudas, dentro del proletariado.
Eso se relaciona con la doble opresión del pueblo negro y de otros pueblos oprimidos: su opresión como parte de una nación oprimida (o minoría nacional oprimida) por un lado, y su opresión y explotación como parte de un solo proletariado multinacional, por el otro. Esa doble opresión coloca a las masas del pueblo negro, y de otras nacionalidades oprimidas, en una poderosa posición estratégica con respecto a la revolución proletaria. Así sigue siendo, como he venido recalcando, a pesar de los muchos cambios de "alta tecnología" que se están dando en la economía, y en la composición y configuración de clases en Estados Unidos. (Véanse los números 885, 886 y 887 del OR.) Por otra parte, los negros de todas las clases y capas, no solo del proletariado, sufren opresión como parte de una nación oprimida. Si bien esa opresión afecta de diferentes maneras y en diferentes grados a las distintas capas, todas comparten una experiencia y opresión común como pueblo.
Todo eso sienta la base material para el "núcleo sólido". Esto encierra dos contradicciones distintas: la opresión nacional y la opresión de un solo proletariado multinacional. Sin embargo, aunque son dos contradicciones distintas (y no se pueden fundir, "dos en uno"), ambas arrancan de una contradicción fundamental y tienen una sola resolución: el derrocamiento del capitalismo y la continuación de la revolución para avanzar hacia el comunismo junto con el proletariado internacional.
Como dice nuestro Programa, si bien hay diferencias entre el pueblo afroamericano como nación oprimida y otras nacionalidades oprimidas en Estados Unidos, tienen mucho en común en que comparten la opresión nacional y sus características más salientes: brutalidad policial; segregación y discriminación, no solo en la vivienda y el empleo, sino en toda esfera de la vida, como la supresión y mutilación de su cultura e idioma. Comparten todas esas cosas esenciales, además de sus reivindicaciones y luchas, pero también existe la particularidad del derecho a la autodeterminación del pueblo afroamericano como nación oprimida.
Todo eso—la doble opresión y el hecho de que hay dos contradicciones distintas (la opresión nacional, y la opresión y explotación del proletariado multinacional), así como el hecho de que las dos surgen de una contradicción fundamental del capitalismo y de que tienen una sola resolución por medio de la revolución proletaria—establece lo que nuestro Partido llama los "mil lazos" de las nacionalidades oprimidas y sus luchas contra la opresión nacional con el movimiento revolucionario del proletariado multinacional. "Mil lazos" que unen esas luchas objetivamente y en un sentido general, y que le dan una enorme fuerza a la causa revolucionaria del proletariado.
Opresión inherente al sistema
La importancia estratégica de la cuestión nacional en Estados Unidos y sus "mil lazos" con el movimiento proletario revolucionario se expresa también en el hecho de que esa opresión (del pueblo afroamericano y de otras nacionalidades oprimidas) es inherente a la fundación y estructura de la sociedad capitalista estadounidense y a su dominio imperialista en el mundo. Es tan crucial e integral para la perpetuación de la estabilidad y fuerza relativa en la "patria" del imperialismo estadounidense y su imperio mundial, que los imperialistas no pueden abolir ni extirpar la opresión y toda la estructura de supremacía blanca aun si lo quisieran.
Además de que esa opresión les conviene económicamente y abona su proceso de acumulación (al mantener a un sector de la población en una posición en que lo pueden superexplotar y con el que pueden "rebajar" la situación de las masas trabajadoras en general e intensificar la explotación general del proletariado), tanto social como políticamente, cualquier intento de arrancar esa opresión nacional del tejido de la sociedad estadounidense y de redefinirla sin ella desgarraría completamente el tejido social actual, como se ha desarrollado históricamente bajo el dominio capitalista. Naturalmente, si bien nosotros, que representamos al proletariado revolucionario, aplaudimos eso, la clase dominante imperialista no hace ni puede hacer lo mismo.
Nuestro punto fundamental de orientación es ganar a las masas proletarias, de todas las nacionalidades, a una posición proletaria ante este y todos los demás problemas en el sentido más amplio, y guiada por los objetivos eminentes y de largo plazo de nuestra clase. Como establecen el Programa y PVVL, nuestro objetivo estratégico es ganar a las masas proletarias básicas a la posición y programa de su clase, al mismo tiempo que se reconoce la existencia objetiva de movimientos nacionales (con diferentes fuerzas de clase, diferentes líneas y programas opuestos) y la importancia crucial de forjar una alianza revolucionaria entre esos movimientos nacionales y su lucha contra la opresión nacional, por un lado, y la lucha revolucionaria consciente de clase del proletariado, por el otro.
Por eso hay que desarrollar los "mil lazos" entre la lucha para acabar la opresión nacional y los objetivos revolucionarios del proletariado consciente de clase; desarrollar el hecho objetivo de que la opresión nacional es inherente a la fundación, el orden y la estructura de las relaciones capitalistas-imperialistas, y que solo se puede abolir tumbando y eliminando esas relaciones; desarrollar todo eso sin "reducir" la cuestión nacional a la "cuestión clasista" en un sentido estrecho y, lo que es más importante, sin reducir los intereses del proletariado a algo estrecho, sino captar la naturaleza omnímoda y transformadora del mundo de esos intereses y actuar en consecuencia.
El punto de vista proletario
En términos filosóficos se podría decir de esta manera: tenemos que dividir uno en dos con respecto a la cuestión nacional y la "cuestión clasista", y no combinar dos en uno. El marxismo-leninismo-maoísmo lo considera todo, no solo la "clase", desde la posición, intereses y punto de vista del proletariado, y no de ninguna otra clase. Desde la posición del proletariado, y solo desde dicha posición, es posible captar correcta y completamente la esencia de esas distintas contradicciones, como la opresión nacional, la opresión de la mujer, etc. Y solo desde ese punto de partida es posible ver que esas contradicciones arrancan de la contradicción fundamental del capitalismo y solo se pueden resolver a través del derrocamiento del sistema capitalista y de la resolución de su contradicción fundamental a través del avance de la revolución proletaria.
Solo con el punto de vista del proletariado se puede apreciar todo eso de una manera global, sin tratar de reducir o "machacar" todo a una mezcolanza de contradicciones, que haría imposible dirigir una lucha revolucionaria consecuente y cabal.
Aquí es muy importante destacar un punto que Lenin recalcó en oposición a ciertos marxistas (algunos de las nacionalidades oprimidas) que tendían a liquidar la cuestión nacional. Lenin recalcó un punto muy importante con respecto al proceso histórico de la transición de la época burguesa a la época del comunismo mundial. Dijo que la meta final, lo que alcanzaremos en el camino al comunismo, implica superar y sobrepasar las divisiones nacionales y, de hecho, la existencia misma de las naciones; todo eso se logrará por medio de la lucha por el comunismo y su triunfo. Pero, recalcó que eso se puede lograr solo por medio de un período de transición signado por la lucha en defensa del derecho a la autodeterminación y la liberación de las naciones oprimidas.
El núcleo sólido
Volvamos específicamente a la cuestión del "núcleo sólido" del frente único, para lo cual podemos usar una formulación un tanto polémica: aun si no hubiera proletarios blancos en Estados Unidos, o incluso si los hubiera pero fuera imposible ganarlos a la revolución proletaria (ese no es de ninguna manera el caso, pero supongamos que fuera), el núcleo sólido seguiría siendo una formulación correcta, pues sería necesario prestarle atención particular a la forja del núcleo sólido como parte esencial del amplio frente único, bajo dirección proletaria, para hacer la revolución: para tomar el poder, transformar la sociedad y avanzar hacia el comunismo a nivel mundial.
Además de recalcar la importancia general del núcleo sólido, lo que aquí se está recalcando (con esta formulación polémica) es que el núcleo sólido no es una manera de unir a la gente de color con los blancos o específicamente con los "obreros blancos"; tampoco, para "decirlo a la inversa", es un medio o artimaña para crear una especie de alianza entre dos fuerzas completamente diferentes: la "clase obrera", concebida esencialmente como "obreros blancos", y las nacionalidades oprimidas, concebidas como un grupo o masa indistinguible, sin distinciones de clase.
El núcleo sólido se basa en la existencia tanto de un solo proletariado multinacional en Estados Unidos (con el papel crucial del proletariado de las nacionalidades oprimidas), como de distintos movimientos nacionales (que surgen y gravitan en torno a la contradicción de la opresión nacional, aunque en última instancia arrancan de la contradicción fundamental del capitalismo); movimientos nacionales que representan distintas fuerzas e intereses de clase que compiten entre sí.
El núcleo sólido es una manera de desarrollar de la manera más poderosa los "mil lazos" entre las nacionalidades oprimidas y su lucha contra su opresión como pueblos, y el movimiento revolucionario del proletariado multinacional.
El núcleo sólido es una manera de abordar esas entidades separadas pero estrechamente ligadas de tal manera que se aliente su poderosa orientación contra el sistema y que las dirija, de una manera unificada, hacia su resolución definitiva y fundamental por medio del derrocamiento del capitalismo y la transformación socialista de la sociedad. Es importante recalcar las palabras "resolución definitiva y fundamental" porque solo a través de la revolución proletaria (empezando con la toma del poder y pasando a la transformación de la sociedad y el mundo para lograr el comunismo) se podrá abolir y extirpar de una vez por todas la opresión nacional, así como todas las demás formas de opresión y explotación. Por otro lado, la lucha contra la opresión nacional tiene su propia dinámica, su propia contradicción particular que hay que resolver, dentro de la dirección general y la resolución definitiva de la contradicción fundamental del capitalismo y la época burguesa.
Como señaló Mao en "Sobre la contradicción", las contradicciones cualitativamente diferentes solo pueden resolverse por métodos cualitativamente diferentes (la opresión nacional se resuelve por medio de la lucha de liberación nacional; la explotación clasista se resuelve por medio de la lucha contra esa explotación clasista). Por otra parte, en un proceso global, con todas sus complejidades, existe una contradicción fundamental; aquí estamos hablando del proceso de avanzar de la época burguesa a la época del comunismo mundial, que tiene una contradicción fundamental: la contradicción fundamental del modo de producción burgués, entre la producción socializada y la apropiación privada. Todas las demás contradicciones que son parte de la transición de una época a otra, como la opresión nacional, tienen su propio carácter, su propia peculiaridad, pero fundamentalmente arrancan y son parte del proceso de avance hacia la resolución de la contradicción fundamental del capitalismo por medios revolucionarios, para avanzar de la época burguesa a la época del comunismo mundial.