Durante los casi 250 años de esclavitud en Estados Unidos y los 150 años de la segregación Jim Crow "vieja"1 y nueva que la siguió, una de las prácticas más atroces ha sido la imposición violenta de ignorancia perpetrada en contra del pueblo negro por los supremacistas blancos que manejan este sistema. Durante siglos en este país, seres humanos negros esclavizados que se atrevían a aprender a leer o a enseñar a otros a leer sufrían como de rutina que los torturaran, los vendieran separándolos de sus familias, los mutilaran, o hasta los asesinaran. Durante el siglo y medio que siguió, a los niños negros les negaban la educación de plano o los mandaban a escuelas segregadas que carecían de todo recurso; y cuando se atrevían a asistir a las escuelas de blancos, los atacaban con lujo de violencia las turbas de idiotas blancos racistas.
Hoy en día, siendo las escuelas aún más segregadas de lo que estaban en 1954 cuando supuestamente se prohibió la segregación, y siendo las disparidades y desigualdades aún mayores ahora que en ese entonces, la policía encerrando y maltratando a los estudiantes en las mismas escuelas, y siendo emperrada la secretaria de educación trumpista en recortar aún más los recursos y canalizar a niños afroamericanos a fábricas de lavado de cocos fascistas cristianas, esta práctica típicamente estadounidense está tan asquerosamente vivita y coleando como siempre.
Como parte de esta práctica, los supremacistas blancos en esa época y hoy en dia han declarado que los resultados de esa deseducación sistemática a punto de pistola “comprobaron” que los negros eran intelectualmente inferiores. Sin importar que las pruebas que usaron para supuestamente “comprobarlo” eran en sí cargadas de prejuicios culturales y fuertemente influenciadas por oportunidades educativas concretas (y en el caso de los exámenes SAT y otros exámenes del “desempeño”, impactados por la práctica de padres con mayores recursos, por lo general blancos o asiáticos, de contratar a tutores y cursos de preparación, etc.). Cada década, al parecer, si no más frecuentemente, sale algún otro racista “con muchas credenciales” con aun otro argumento falso que recibe montones de publicidad y obliga a científicos auténticos y otros que aplican la ciencia a desmentir esa vil mentira.
Todo eso es el contexto de la más reciente exhibición fea de eso por Donald Trump, esa apoteosis de ignorancia y arrogancia estadounidense al estilo “nunca-leo-un-libro-y-eso-me-da-orgullo”: sus ataques contra la estrella basquetbolista y figura pública LeBron James.
La aspiración de LeBron James
El 30 de julio, LeBron James abrió una escuela para jóvenes “en peligro” en su ciudad de origen, Akron, Ohio. Donó millones de dólares para hacerla una escuela pública de las mejores (no una escuela particular subvencionada). También dedicó dinero para regalar una bicicleta y un casco a cada niño que asiste esta escuela para que pueda explorar el mundo a su alrededor.
La aspiración detrás de lo que LeBron James ha hecho —el impulso de hacer algo concreto para por lo menos comenzar enriquecer el presente y salvar el futuro de estos niños— es algo que se debe apreciar y respetar. Es ultrajante que requiere que un multimillonario lo haga y el alcance de lo que él pueda hacer se limite a una sola ciudad mediana, pero la culpa la tiene este sistema caduco, no la tiene James.
En el momento que James abrió la escuela, Donald Trump decidió lanzar un ataque contra él por “bobo” – y a atacar también al presentador de CNN, Don Lemon, un negro. Trump es el mismo puerco imbécil que se ha aprovechado del “púlpito” de la presidencia para atacar a la congresista negra Maxine Waters (una crítica de Trump) por ser de “bajo CI (Coeficiente Intelectual)” y atacar a jugadores negros del futbol americano que se han atrevido a protestar durante el himno nacional. Trump, igual como los esclavistas que lo inspiran y los sabuesos aullantes a los cuales encabeza, odia el espectro de negros con educación. Lo considera amenazante.
Así que, no es de sorprenderse que Donald Trump atacara a LeBron James por su escuela y que lo calificara de “bobo”. Trump ha estado recortando gravemente los fondos ya de por sí escasos para la educación pública y especialmente para escuelas en zonas urbanas marginadas. Pero lo que distingue Trump de la serie de presidentes anteriores que han hecho lo mismo es su predilección fascista particular. Piénselo: Trump tacha de “bobo” a una persona que no solo tiene la aspiración sino la determinación para hacer cumplir un esfuerzo para educar, realmente, a alguna pequeña parte de los niños a los que este sistema ha destinado a fallar. Esto es lenguaje nazi para llamarlo “subhumano” — los que merecen ser acorralados, suprimidos a golpes, y, en última instancia, si así de deciden los poderes fácticos, encerrados en campos de concentración.
Como todo racista, Trump teme y odia la mera idea de educar a niños negros (no indoctrinarlos sino educarlos). Teme el potencial de los oprimidos una vez que se les desencadene el pensamiento crítico. ¿Creen que sea un accidente que en su arranque contra los jugadores de la NFL (mayormente negros) que protestaban hincándose durante el himno nacional, que también atacó los esfuerzos de limitar las conmociones cerebrales en el futbol americano, que dañan el cerebro? Qué cosa más perversa. Trump es la versión actualizada del esclavista que le corta la lengua a una esclava por aprender a leer, luego se burla de ella por no poder hablar; y cuando ella se las arregla para comunicarse de todos modos, pues la ataca de nuevo.
Cabe repetir: esto es potencialmente un programa de genocidio y ahora mismo es un programa de represión draconiana y privación altamente intensificada. Esto cuadra con traumatizar al adrede a niños de inmigrantes separándolos de sus padres y en algunos casos dejándolos huérfanos para siempre. No solamente hay que oponérsele a eso; hay que expulsar al régimen fascista ilegítimo en conjunto.
Los demócratas no tienen ninguna respuesta...
Pero, adentrémonos más. La aspiración de James de educar a los jóvenes de Akron debe plantear una pregunta mayor. ¿Por qué, 65 años después de esa solemne declaración de este sistema de su intención de abolir la segregación e igualar las oportunidades educativas, todavía están segregadas las escuelas en muchas partes y se están volviendo aún más segregadas; y por qué las disparidades en los resultados educativos para estudiantes de diferentes orígenes apenas mejoraron tantito, y ahora se empeoran de nuevo en muchos casos? ¿Por qué la gente tiene que depender de las buenas intenciones y la caridad de un millonario para ayudar a lo que es en realidad una parte pequeñísima de los que podrían contribuir y florecer tanto, si el sistema fuera diseñado para fomentar eso?
Otra pregunta más: si bien Trump ha llevado esto mucho más allá, ¿qué han hecho los demócratas durante todas estas décadas, que incluyen los tiempos en que tenían el poder? ¿Qué hizo Obama como presidente — excepto sermonear a estudiantes negros a “subirse el pantalón” y dejar de “echar la culpa”… a un sistema que es diseñado para hacer que fallen? ¿Qué hicieron los Clinton, aparte de satanizar a niños negros como “super-predadores” potenciales, acelerando la encarcelación en masa, terminando el “welfare así como lo conocimos”, y cometiendo tantos crímenes más? Y ¿por qué los demócratas prominentes hoy no están escandalizados por los ataques de Trump contra LeBron James y otros, por qué no están denunciando estos ataques por totalmente racistas e inaceptables y por qué no reclaman la destitución de este supremacista blanco tan descarado e irredento?
Estos demócratas han comprobado, tanto en el pasado como en el presente, que no tienen ninguna respuesta a esto, ninguna manera para poner fin a esta práctica repugnante que está en el mero núcleo de la supremacía blanca.
Pero la revolución sí…
Este sistema del capitalismo-imperialismo se crió con la supremacía blanca y sigue enmarañado con ella. Ha tenido 400 años para solucionar esto y hoy, como hemos dicho, las escuelas están aún más segregadas que nunca. Los jóvenes negros y otros jóvenes de color siguen siendo canalizados a la “vía directa de la escuela a la prisión”, y el racismo virulento de Estados Unidos es exaltado desde el puesto más alto del país, casi sin oposición.
De hecho, SÍ que existe un plano para un sistema completamente nuevo en que la educación tendría un diseño específico para superar las desigualdades y cicatrices del pasado, entre otros propósitos, como parte de producir una sociedad de pensadores críticos y creativos, inculcados en el método científico. Una sociedad que deshaga y abola la opresión de los negros y de otras nacionalidades oprimidas, como parte de emancipar a toda la humanidad. Se puede hacer esto — por medio de una REVOLUCIÓN que derroque a este sistema.
ESTO —y no la catástrofe fascista representada por Trump, ni el desastre capitalista-imperialista “usual” que en el mejor de los casos relega a millones de personas al molino de carne— es el futuro que necesitamos urgentemente, un futuro que de hecho es muy posible (vea aquí para ver cómo se puede hacer semejante revolución). La Constitución para la Nueva República Socialista en América del Norte, escrito por Bob Avakian, establece, como conjunto y en muchas diferentes secciones específicas, por qué y cómo el nuevo estado revolucionario, para citar el preámbulo, “se basa en el principio de igualdad entre diferentes nacionalidades y culturas y uno de sus objetivos esenciales es eliminar por completo la opresión nacional y la desigualdad entre las nacionalidades, lo que fue una parte tan fundamental de los Estados Unidos de América imperialistas a lo largo de su historia. Es posible vencer y superar por fin las divisiones en la humanidad entre países y naciones y construir una comunidad mundial de seres humanos en libre asociación únicamente sobre la base de estos principios y objetivos. Esta orientación también está encarnada en las diversas instituciones del estado y el funcionamiento del gobierno en la Nueva República Socialista en América del Norte”. Y, hablando de la educación, establece un plano para la educación en la nueva sociedad que es tan visionario e inspirador como lo es práctico.
Conéctese con la revolución. Éntrele a BA.
NO ES POSIBLE REFORMAR EL SISTEMA, ¡HAY QUE DERROCARLO!
¡UN MUNDO MEJOR ES POSIBLE!
1. El hecho de que el “antiguo” Jim Crow sigue vivo se ha comprobado una y otra vez este verano con tantos casos en que blancos deciden poner a negros “en su lugar”, a veces asesinándolos, y ahora con el acribillamiento repetido por racistas del memorial en Misisipí para el víctima de linchamiento Emmett Till. Lea más aquí. [regresa]
Little Rock, Arkansas, 1957. Una de los nueve estudiantes afroamericanos que se inscribieron en la secundaria Little Rock Central, los primeros para integrar la escuela, bajo ataque de una turba de idiotas blancos racistas.
CONSTITUCIÓN Para La Nueva República Socialista en América del Norte
(Proyecto De Texto)
De la autoría de Bob Avakian, y adoptada por el Comité Central del PCR
De Artículo 1, Sección 2, F. La educación
1. La educación en la Nueva República Socialista en América del Norte se establecerá en concordancia con los principios y los objetivos expuestos en la presente Constitución y contribuirá a los mismos. Toda la educación será pública, financiada por medio de la erogación de fondos provenientes del gobierno central y otros niveles del gobierno, bajo la dirección general del Consejo Ejecutivo del gobierno central.
A expensas del gobierno, se dispondrá de educación no solamente para el alfabetismo y otras capacidades y destrezas básicas sino también para una base en las ciencias naturales y sociales como también en el arte y la cultura y otras esferas y en la capacidad para trabajar con las ideas en general, y la educación será obligatoria para todos los jóvenes (ciudadanos y residentes por igual) en la Nueva República Socialista en América del Norte en conformidad con la política y las pautas que habrán de adoptar los organismos gubernamentales adecuados para este propósito. A expensas del gobierno, también se dispondrá de educación superior que combine la especialización con la continuación del aprendizaje integral y general para aquellos que reúnen los criterios y los estándares para esta educación más avanzada tal como se establece en las políticas y las pautas elaboradas por los organismos de gobierno pertinentes en conformidad con los principios y los objetivos plasmados en la presente Constitución. Y sobre la base del desarrollo de la economía socialista y la sociedad en general y al unísono con dicho desarrollo, el estado tendrá la orientación de ofrecer tal educación superior a un número creciente de personas de la población adulta. Para estos fines, se desarrollarán museos relacionados a la historia, la historia natural y las ciencias, el arte y otros ámbitos, así como otras instituciones y programas, en concordancia con los principios y objetivos básicos expuestos aquí, y se pondrán a la disposición de amplios sectores del pueblo en general.
La educación, si bien valora y expresa las circunstancias y el ambiente que sean favorables y propicias para el aprendizaje y la actividad intelectual, evitará y combatirá un ambiente y mentalidad tipo “torre de marfil” y, por el contrario, promoverá intercambios entre los estudiantes y entre los sectores más amplios del pueblo sobre la base de los principios y las políticas del sistema educativo y en concordancia con los mismos. Al mismo tiempo, la educación a todos los niveles combinará la actividad intelectual con varias clases de trabajo físico de maneras y formas que correspondan y sean apropiadas para los estudiantes de diferentes edades y diferentes niveles de desarrollo a fin de alentar el desarrollo de nuevas generaciones de personas con experiencia, conocimientos y destrezas integrales y como parte de trabajar para transformar la relación entre el trabajo intelectual y el trabajo físico de modo que ya no constituya la base para los antagonismos sociales.
El estado en general se ocupará de superar, en la sociedad (y a la larga en el mundo) en su conjunto, el antagonismo relacionado a la división entre el trabajo físico y el trabajo intelectual, que está profundamente arraigado en el desarrollo de las sociedades caracterizadas por las relaciones explotadoras y opresivas y el que en sí representa una fuente potencial de tales relaciones, y se le prestará atención en todas las esferas de la sociedad. (páginas 32-33)