El sábado 15 de noviembre, Rechazar el Fascismo, en cooperación con otros, movilizó a más de 250 personas para rodear la Casa Blanca con cinta amarilla de escena del crimen. Quedaron paradas durante más de una hora, en una fila de más de kilómetro y medio, y gritaron su demanda de ¡Que Se Largue Trump… YA!

Lo primero que hay que decir sobre esta manifestación es esto: si la determinación, energía, creatividad, ferocidad y amor fueran lo único que se necesita para cumplir esa enorme tarea de expulsar del poder al Hitler anaranjado, pues a lo mejor la jornada de cuatro a cinco horas en la calle el sábado lo hubiera cumplido. 

Pero, como los propios organizadores pusieron claro ante todos, hace falta más — mucho pero mucho más. El objetivo y propósito de la acción del sábado era dar el siguiente paso para desarrollar el movimiento necesario para obtener ese objetivo crítico, ¡que se largue Trump YA!

Imaginar lo que se necesita… y trabajar para hacerlo realidad

Andy Zee tomó el micrófono e hizo una petición: 

Les voy a pedir que se cierren los ojos un momento. Bien. Imagínense un mar de gente. Desde aquí, a la Casa Blanca, al Capitolio, a la Corte Suprema, a cada institución, propagándose por debajo del suelo, sacudiendo el suelo, pasando por debajo del Río Potomac hasta aquellas personas todavía en el Pentágono que sienten algún grado de descontento por el despido de negros y latinos y mujeres y gente trans de las fuerzas armadas, personas a las cuales les repugna la idea de librar una guerra en territorio estadounidense y combatir contra la misma gente que compone este país. Podemos sacudir estas instituciones. Todos los días, necesitamos a miles de personas en las calles de Washington, D.C. Ahora, y no en el año que viene, no tras esperar a ver lo que vaya a pasar, sino ahora, los centenares de ustedes tienen que convertirse en miles que se conviertan en millones…

Cada uno de ustedes ahora es un líder. Y no solamente están liderando a sus amigos y vecinos. Están liderando a las demás personas de conciencia en estas instituciones aquí. Y les están diciendo que no acaten las normas de la sociedad sino que hagan lo que hay que hacer para expulsar al régimen. A las personas que oponen resistencia a ICE, les está diciendo que sigan pero que tomen las calles de la capital al mismo tiempo. A las personas que dan alimentos a los hambrientos, que albergan a los sin techo, que sigan pero que vayan a la capital porque no van a escudar contra Trump a una sola ciudad. No van a escudar contra Trump a un solo estado. El poder político de un régimen fascista reside al otro lado de esta calle y es necesario desalojarlo. 

De hecho, no son solamente millones sino VEINTENAS de millones de personas que aborrecen desde la tapa de la cabeza hasta la planta de los pies a este régimen. Son más de unos pocos, desde todos los ámbitos, los que se han arriesgado a todo para plantársele duro a los sádicos criminales de ICE. Miles, y luego millones, de otras personas han estado “presentes” en otras formas.

La razón por la que no podemos esperar, en absoluto

Pero la inmensa mayoría de aquellas personas que detestan a Trump no se han convencido —aún— de que todos estos ultrajes forman parte de una orientación global de transformar la sociedad sobre una base concretamente fascista, que está acelerándose velozmente. No “autoritario” nada más, sino fascista. Sunsara Taylor proveyó el tipo de agitación contundente que se requiere para poner eso claro ante la gente:

No nos encontramos en tiempos normales. Estamos en un tiempo en que el tirano fascista en la Casa Blanca ya incitó una insurrección, indultó a los insurrectos en su primer acto el día primero de su régimen, y esta semana indultó a 77 más de las personas que trataron de robarse las elecciones. Su movimiento ha metido a los que negaron la pérdida electoral de Trump en cargos estatales clave para supervisar los comicios venideros en 18 estados…

No es solamente que no tenemos tiempo para esperar un año y medio para que nuevos políticos asuman sus cargos, no tienen tiempo los inmigrantes cuyas familias ahora están resultando desgarradas. No tiene tiempo la gente trans cuyos derechos ahora están resultado eliminadas. No tiene tiempo el planeta que ahora mismo está resultado destruido. No tienen tiempo la ciencia y la medicina que ahora están resultando desmanteladas. No tienen tiempo el mundo académico y las universidades que están resultando purgados de toda discusión del género y raza y de la maldita historia verdadera de Estados Unidos. No tiene tiempo la esfera del derecho que está bajo ataque con la extorsión a bufetes a manos de este régimen.

Pues no se trata solamente de que no tenemos tiempo. Tendrías que estar fumando algo para creer que aquel vaya a respetar cualesquier comicios que pierda. Así que no podemos esperar las elecciones de mitad del mandato y no podemos contar con esas elecciones. Tenemos que actuar ahora.

El reto a aquellos que están sentados en la banca: Métanse a la cancha

Jim Keady retó a todos aquellos que reconozcan el fascismo en la Casa Blanca pero aún no actúan para salirse de su zona de confort: 

 A las personas que no están aquí y que están en casa hoy, los oímos… Los oímos si tenemos conversaciones personales. Vemos lo que postean en su Facebook, en sus posteos de Instagram, Threads, señales de humo, lo que usen. Sabemos que dicen creer que Trump es un fascista… Sabemos que dicen creer que él viene consolidando el poder, que él quiere aplastar el disentimiento, convertir en arma a los tribunales, convertir a nuestras fuerzas armadas en arma contra nuestra propia gente en Estados Unidos.

Ustedes saben eso, y tienen su motivo o sus múltiples motivos por los cuales también creen que Trump tiene que largarse ya. Y si lo creen, si lo creen de corazón, tienen que hacerse la pregunta, si creen que el fascismo ocupa la sede del poder actualmente en nuestra Casa Blanca, ¿qué les es más importante hacer un sábado por la tarde, aparte de salvar a nuestra república de aquel régimen fascista?...

No digo estas palabras para regañar a ustedes que no están aquí con nosotros hoy. Pero es una invitación y un reto de parte de un entrenador. El Entrenador Keady les dice que ya es hora de salir de la banca.

Tras horas de marchar, aquellos en la multitud que se agruparon no solamente para organizarse entre sí mismos sino para convertirse en organizadores de otros, empezaron a formar la respuesta viva a esa convocatoria urgente. Hicieron planes para movilizar a las personas para salir el lunes 17 de noviembre, y después el siguiente lunes 24, así como para la manifestación de Remove the Regime (Sacar al Régimen) el sábado que viene. Estas manifestaciones, en conjunto, tienen que desarrollar el poder de la gente para EXPULSAR a este régimen. 

Y tú, ¿qué vas a hacer?