En medio de una hambruna masiva impuesta por la fuerza, Israel no ha dejado de bombardear Gaza. Bombas contra tiendas de campaña. Bombas contra casas. Bombas contra un puesto de agua. Bombas contra una estación de carga de celulares en un campo de refugiados. Asesinados tantos niños, bebés, médicos, periodistas, artistas y soñadores.
Israel masacró a tres niños mientras dormían en un ataque aéreo contra una tienda de campaña en Jan Yunis. Foto posted by @MosabAbuToha
Mientras Israel continuaba lanzando bombas estadounidenses sobre Gaza, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, llegó a Estados Unidos el 7 de julio para mantener conversaciones privadas a puerta cerrada con el comandante en jefe fascista estadounidense, Donald Trump. Los titulares se centraron en un posible acuerdo de alto el fuego en Gaza entre Israel y Hamás1. Trump predijo que existían buenas posibilidades de alcanzarlo durante la semana. Su secretaria de prensa afirmó que era su “máxima prioridad”.
Al día siguiente de esta reunión, el 8 de julio, Israel mató a más de 100 personas en Gaza.
Resultó que no iba a realizarse ningún acuerdo de alto el fuego, y todas las partes lo sabían2. Todo el bombo y platillo en torno a estas negociaciones la semana pasada tenía como objetivo ocultar la enormidad de los crímenes que Estados Unidos e Israel están cometiendo, y el verdadero propósito de las reuniones entre Trump y Netanyahu: una luz verde del fascista Trump para nuevos saltos en los planes de los dos para la destrucción y limpieza étnica de Gaza, y para nuevas medidas estadounidenses e israelíes para aplastar a sus adversarios, transformar radicalmente Oriente Medio y consolidar violentamente el dominio imperialista estadounidense e israelí en Oriente Medio y más allá3.
Muchos comentaristas de los principales medios de comunicación desestimaron el llamado de Trump para expulsar a todos los palestinos de Gaza como una “sugerencia” de la que “luego se retractó”. Trump ha seguido repitiendo esta “sugerencia” de una limpieza étnica genocida total y abierta, para deleite de Netanyahu: cuando se le preguntó sobre el futuro de Gaza más allá de un alto el fuego a corto plazo, Netanyahu dijo: “El presidente Trump tuvo una visión brillante. Se llama libre elección. Si la gente quiere quedarse, puede quedarse, pero si quiere irse, debería poder irse. No debería ser una prisión”. Y dijo que Israel estaba trabajando estrechamente con Estados Unidos para encontrar, u obligar, a los países a acoger a los palestinos expulsados de Gaza.
Trump intervino para expresar su acuerdo: “Hemos contado con una gran cooperación de [los países]… que rodean a Israel… una gran cooperación de todos y cada uno de ellos. Así que algo bueno ocurrirá”.
Palestinian children killed at GHF aid sites in Gaza | AJ#shorts
“¿Libre elección?” “¿No debería ser una prisión?” Es difícil imaginar algo más obsceno y criminal. ¡Israel ha convertido Gaza en una prisión al aire libre y una zona de fuego libre durante los últimos 58 años! Desde octubre de 2023, ha bombardeado, arrasado con buldóceres, impuesto la hambruna y masacrado a la gente de allí. ¿Y ahora habla de “libre elección”? Es un asesino en masa con una pistola contra tu cabeza que te da la “libre elección” de entregarle las llaves y marcharte de tu casa, o de lo contrario...
Más fundamentalmente, la visión de Trump de expulsar violentamente a los palestinos de Gaza es muy real y muy seria. Si bien Trump sigue con el respaldo que Biden dio al genocidio israelí en Gaza, esto también representa un salto cualitativo en su forma de terrorismo y violencia abiertos. El líder revolucionario Bob Avakian describió el programa fascista de Trump para el mundo de esta manera: “el poder destructivo puro y duro es lo que tiene que regir en el escenario internacional, sin siquiera la pretensión de adherirse al derecho internacional ni preocuparse por la soberanía, o incluso el derecho de existir, de los pueblos y países menos poderosos”.
La realidad es que Estados Unidos e Israel han estado actuando según la visión genocida de Trump para los palestinos desde que la expresó por primera vez en enero y febrero. Y ahora preparan un nuevo paso, aún más letal.
“Un campo de concentración es un campo de concentración”
Un campamento para palestinos desplazados se extiende entre los edificios destruidos por las bombas israelíes, el 21 de junio de 2025. Foto: AP
El lunes 7 de julio, al llegar Netanyahu a Estados Unidos, el ministro de Defensa israelí, Katz, anunció planes para la construcción de lo que denominó una “ciudad humanitaria” sobre las ruinas de lo que fue la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza. Katz explicó que esta “ciudad” planificada se basaba en la visión de Trump para Gaza. Resulta que es un enorme campo de concentración, una estación de paso para la expulsión forzosa de palestinos. Esta escandalosa y aterradora noticia apenas fue mencionada por los principales medios de comunicación, si es que llegó a mencionarse4.
Según el plan revelado por Katz, 600.000 palestinos desplazados, que ahora se encuentran en campamentos y casas improvisadas en la zona de al-Mawasi en el sur de Gaza, se verían obligados a trasladarse a una pequeña zona en lo que era Rafah, una ciudad de 250.000 habitantes antes de que Israel expulsara a la población y la arrasara por completo.
“Una vez que lleguen a esta nueva zona, se les realizarán controles de seguridad. No se les permitirá salir una vez que hayan entrado”, dijo Katz. “Con el tiempo, toda la población civil de Gaza, más de dos millones de personas, quedaría confinada en esta pequeña ‘ciudad’”, informó Haaretz.
Cuando se le preguntó cómo la nueva “ciudad humanitaria” alimentaría a los palestinos, Netanyahu respondió: “Denles [helado] Ben & Jerry’s, por lo que a mí respecta”, dijo una fuente a Haaretz5.
“Un campo de concentración es un campo de concentración”, declaró el periodista israelí Arad Nir. “Cuando se concentra a la gente en campamentos sobre escombros y se les da comida allí, eso es un campo de concentración. Y sí, debemos recordar la connotación, porque es un campo de concentración. Eso es lo que se está planeando aquí”6.
La connotación a la que se refiere son los campos de concentración que los nazis usaron para encarcelar y exterminar a los judíos durante el Holocausto, lo que resultó en el asesinato sistemático de 12 millones de personas, la mitad de ellas judíos.
No hay un calendario claro para la construcción de este campo de concentración, pero Katz previó la posibilidad de hacerlo durante el alto el fuego de dos meses que se está discutiendo. De ser así, sería un verdadero alto el fuego para el genocidio7.
El campo de concentración de Rafah: una continuación y un salto en el genocidio estadounidense-israelí
Este nuevo campo de concentración estadounidense-israelí aún no se ha construido, y es posible que no se construya. Pero no es una quimera ni una fantasía de Trump. Es la continuación —y un salto más allá— de la estrategia que Israel ya ha estado llevando a cabo, como la Operación “Carros de Gedeón”, en colaboración con Estados Unidos, en particular con el régimen fascista de Trump.
- Israel ahora ha desplazado por la fuerza y confinado a los palestinos a sólo un 15 por ciento de Gaza.
- Ha destruido la mayor parte del territorio con misiles, bombas y buldóceres8.
- Ha masacrado a más de 57.000 palestinos (y el número real de muertos es probablemente el doble) y ha intensificado las matanzas en las últimas semanas.
Una mujer palestina, desplomada sobre un burro, recibió un impacto en la cabeza con una parte de una granada aturdidora en un centro de distribución de alimentos en Gaza, el 1 de julio de 2025. Foto: AP
- Ha destruido la infraestructura civil de Gaza: viviendas, empresas, hospitales, escuelas, producción de alimentos, distribución de agua, incluso centros religiosos y cementerios.
- Ha matado de hambre a la población, obligándola a arriesgar sus vidas y a desplazarse al sur para comer; ya casi 800 personas han muerto mientras buscaban ayuda.
- La semana pasada, la UNRWA9 informó que el porcentaje de niños de Gaza que sufren desnutrición se ha duplicado desde marzo, en parte porque Israel está impidiendo el suministro de fórmula infantil.
Niños palestinos asesinados en centros de ayuda de la GHF en Gaza.
- La Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), de origen israelí-estadounidense, es un elemento clave de un plan más amplio del gobierno de Netanyahu, con apoyo de Estados Unidos, para concentrar la población de Gaza en una franja estrecha, como preludio a su envío a otros países10.
El sistema completamente podrido que nos ha dado el fascismo de Trump Y el genocidio en Gaza
“No puedo creer que Israel haga esto. No puedo creer que estén haciendo esto. Simplemente no puedo creer que estén haciendo esto”.
Este fue el refrán de una activista de la Voz Judía por la Paz (JVP) que acababa de ser liberada después de participar en una justa acción de desobediencia civil en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York exigiendo el ALTO a este genocidio.
No es difícil entender por qué se siente así: ¿qué carajo podría explicar la crueldad sin límites y el asesinato en masa de palestinos por parte de Israel, incluyendo civiles inocentes e incluso bebés y niños pequeños? ¿Y por qué Estados Unidos inunda a Israel con armamento militar, ayuda y apoyo político para que pueda seguir cometiendo estas atrocidades depravadas?
Existen las respuestas a estas preguntas, y residen en la naturaleza misma del sistema capitalista-imperialista bajo el que vivimos. El problema no es “el lobby israelí”. El problema no son unas pocas corporaciones que se benefician de la venta de armas. El problema es el sistema del imperialismo estadounidense, que requiere de Israel como puesto de avanzada para su sistema en la estratégica región de Oriente Medio. Todo esto ha sido profundamente analizado por el líder revolucionario Bob Avakian, quien también ha propuesto una salida a esta locura y horror: una alternativa y un futuro liberadores con base científica. Visite AQUÍ, AQUÍ y AQUÍ.
En este momento, el futuro mismo del pueblo palestino —y, en realidad, de todo el mundo— pende de un hilo. Mientras se profundiza en estas cuestiones, también es sumamente urgente que toda persona con un corazón firme se oponga activamente al régimen fascista de Trump y al genocidio en Gaza. Como escribimos la semana pasada:
A esos millones de personas que se toman las calles a protestar por las formas viles, despiadados y fascistas en que Trump ha estado reconfigurando la sociedad estadounidense y atacando a grupos enteros de personas, este crimen también merece la condena y protesta activa de parte de ustedes.
Y a los millones de personas en Estados Unidos que ya están angustiados por la enormidad y la crueldad indescriptible del genocidio en curso en Gaza: reconozcan la escalada de esto bajo el fascista Trump, regresen a las calles y únanse a esta causa para exigir ¡que se largue el régimen fascista de Trump YA!